De esta forma ambos dirigentes universitarios reconocen el error de la Universidad de Extremadura en las citadas filtraciones y asumen la responsabilidad que se les estaba demandando, aunque los alumnos afectados también pedían la dimisión del actual rector, Segundo Píriz.
Hay que recordar que el error que ha afectado a miles de alumnos ha tenido como consecuencia 14 descargas que se han llevado a cabo desde 6 dispositivos móviles.
El asunto está ya en manos de la Fiscalía correspondiente y ha conllevado un clamor popular a través de las redes sociales con manifestaciones, concentraciones y encierros de alumnos y declaraciones desde el propio presidente de la Junta de Extremadura, partidos políticos y centrales sindicales además, y como es lógico, desde los movimientos estudiantiles.