Del 15 al 18 de agosto, el festival retrotraerá a Alburquerque al medievo y se transformará para dar “una lección de historia al recrear escenas de la vida cotidiana y lugares de la Edad Media”, gracias a que el escenario en el que se desarrolla este evento es su casco histórico declarado Conjunto Histórico-Artístico.
En la presentación del festival, la secretaria general de Cultural, Miriam García Cabezas, lo ha descrito como un “evento fijo” en la agenda cultural y turística del verano que “contribuye a la dinamización necesaria de los pueblos y sin la que es imposible desafiar ese reto demográfico que tenemos por delante”.
García Cabezas ha señalado que “la cultura es la que nos permite dar una identidad a nuestros pueblos, nos hace sentirnos identificados con el pasado, con el presente y da alas al futuro”.
La secretaria general ha dicho que este festival contribuye a “poner en valor el patrimonio cultural convirtiéndolo en reclamo turístico”.
Ha recordado que este certamen es Fiesta de Interés Turístico Regional y esto lo convierte en un polo de atracción de visitantes, contribuyendo a “dinamizar la zona y generar riqueza y empleo”.
IMPLICACIÓN CIUDADANA
Por su parte, la alcaldesa de Alburquerque, María Luisa Murillo, ha hablado de la alta participación e implicación de los vecinos, emigrantes y visitantes en el desarrollo de este certamen, donde alrededor de 1.000 personas se involucran activamente en las distintas tareas.
Murillo ha destacado que Alburquerque “atesora un gran patrimonio monumental que constituye un museo al aire libre” y ha detallado algunas novedades que se han realizado en el entorno de la ladera del castillo, como ha sido dotarla de zonas ajardinadas y arboleda.
En este sentido, ha resaltado que si importante es su patrimonio monumental, más importante es el “patrimonio humano» y la implicación y la ilusión de todo el pueblo, convirtiéndose en un “festival inclusivo” en el que participan personas de todas las edades.
Ha subrayado que una de las características de este certamen es que es un “festival vivo”, que introduce novedades año tras año y ha afirmado que hay que “apostar por la cultura” porque es uno de los motores que tienen los pueblos para fijar población.
También han asistido al acto el diputado de Cultura de la Diputación de Badajoz, Francisco Martos; la directora del Festival, Ángela Robles; y el responsable artístico del festival, Joaquín Plata.
Ángela Robles ha detallado que este festival que “hace pueblo”, aglutina teatro, danza, música, recreaciones, pero también “es una fiesta educativa” porque enseña la propia historia de Alburquerque.
Por su parte, Joaquín Plata ha pormenorizado las más de 25 actividades programadas que se incluyen en esta 26 edición, entre las que se encuentran representaciones teatrales, conciertos, ambientaciones, mercados artesanales, exposiciones o visitas guiadas, entre otras.
