Cerca de tres meses alejados de la imagen
pública, el Cáceres Ciudad del Baloncesto comparece ante los
medios de comunicación para hacer balance de temporada 2019/20
en el Ayuntamiento de Cáceres acompañados por Luis Salaya,
alcalde de la ciudad y Paula Rodríguez, concejala de deporte.
Dada por finalizada la competición, el presidente del Cáceres
Ciudad del Baloncesto, José Manuel Sánchez ha resaltado “el equipo
merecía jugar por el ascenso, deportivamente ha sido una tristeza”
y señala, “pensando en la ciudad y en la afición decidimos dar el
paso y presentarnos a la fase de ascenso”.
Así mismo, Sergio Pérez gerente y director deportivo de la entidad
verdinegra ha hecho “un balance francamente positivo del año” y
asegura que el club está trabajando activamente para intentar
garantizar al máximo posible la continuidad y la viabilidad del
proyecto. Además, ha destacado la importancia de los patrocinios y
lo indispensable que resulta contar con todos los apoyos necesarios.
El alcalde de Cáceres, Luis Salaya ha confirmado la gran
temporada del Cáceres Patrimonio de la Humanidad, “el Cáceres
nos estaba dando una buena temporada y nos había permitido
soñar, ilusionarnos y disfrutar” y se ha referido al club como “la
imagen fundamental para esta ciudad, un símbolo”.
Por su parte, el técnico verdinegro, Roberto Blanco alaba la actitud
y el compromiso del conjunto, “estábamos en un momento muy
dulce, el equipo estaba creciendo y el trabajo dando sus frutos” y
puntualiza la importante comunión que se ha generado con la
afición, “hemos conseguido una comunión con la afición que hemos
sentido en el día a día, no solo en el Multiusos”.
Tampoco ha faltado a la cita el capitán del Cáceres Patrimonio de la
Humanidad que ha hecho referencia a la dinámica positiva que
llevaba el equipo, “había muy buenas sensaciones, en la segunda
vuelta teníamos una derrota y seis victorias”, explica Luis Parejo
quien, en lo que a su continuidad se refiere, admite “aquí me siento
como en casa, Cáceres lo considero mi ciudad y me siento muy
involucrado con el club”.
En definitiva, el Cáceres Ciudad del Baloncesto finaliza una
temporada atípica con un sabor agridulce pero con el sentimiento
de haber recuperado la ilusión de los cacereños y con la esperanza
de continuar con un proyecto que ha despertado la confianza de
muchos y el compromiso de todos los adeptos que representan el
corazón del baloncesto en nuestra ciudad.
