hospital d benito villanueva de la serena

Un niño de tres años, en estado grave tras sufrir un ahogamiento en la piscina municipal de Cabeza del Buey

Un menor de tan solo tres años de edad permanece ingresado en estado grave en el Hospital Don Benito-Villanueva tras sufrir este miércoles un episodio de ahogamiento por inmersión en la piscina municipal de Cabeza del Buey. La rápida actuación de los servicios de emergencia fue crucial para estabilizar al pequeño antes de su traslado al centro sanitario.

R. DEx, 2 de julio de 2025.- El incidente tuvo lugar pasadas las 12:00 del mediodía, en una jornada calurosa en la que las instalaciones municipales registraban una alta afluencia de familias. Una llamada al 112 Extremadura alertó de que un niño se encontraba en peligro de ahogamiento, sumido en el agua sin responder a estímulos.

La tensión se apoderó de los presentes mientras se activaban los protocolos de emergencia. En pocos minutos, una ambulancia del Servicio Extremeño de Salud (SES) llegó al recinto, junto con efectivos de la Guardia Civil y la Policía Local de Cabeza del Buey.

Intervención sanitaria urgente y traslado hospitalario

El menor fue atendido de inmediato por los servicios sanitarios en el mismo lugar del suceso, donde se le practicaron maniobras de reanimación y estabilización. Posteriormente, fue trasladado de urgencia al Hospital Don Benito-Villanueva, donde permanece ingresado con pronóstico grave.

Aunque no se han facilitado más detalles sobre su estado actual ni sobre las circunstancias exactas del suceso, las autoridades han abierto una investigación para esclarecer los hechos.

Silencio, preocupación y muchas preguntas

La noticia ha conmocionado al municipio de Cabeza del Buey, una localidad tranquila de la comarca de La Serena, donde la piscina municipal es uno de los puntos de encuentro del verano para niños y familias.

Vecinos y bañistas consultados han expresado su consternación y su deseo de pronta recuperación del pequeño. La piscina ha continuado abierta al público, aunque con un ambiente de evidente tensión y preocupación.

COMENTARIO EDITORIAL | DEx

Cuando el verano se detiene

La imagen de un niño riendo en el agua debería ser una postal de felicidad. Pero este miércoles, en Cabeza del Buey, el verano se detuvo. Y con él, la respiración de una comunidad que aún no sale de su asombro.

Los accidentes por inmersión siguen siendo una de las principales causas de muerte infantil en verano, y cada año se repite la misma tragedia con distintos nombres. La vigilancia, la prevención y el cumplimiento estricto de las normas de seguridad no son opcionales: son vitales.

Hoy no hay culpables claros, pero sí una certeza dolorosa: ningún niño debería entrar en una piscina para no salir. El agua, que tantas veces es alivio, también puede ser sombra. Ojalá la esperanza —y la medicina— hagan su parte. El deseo de toda una región late hoy al ritmo del corazón de ese pequeño.