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“¿De qué me sirve la beca si se la queda mi casero?” Becas escasas ante alquileres abusivos

La pancarta que retrata el curso: alquileres por las nubes en los campus extremeños

“Pagamos 500 al mes por cabeza”

“Es algo que debería estar regulado aunque estemos en un libre mercado”, protesta Alberto Diéguez. Él y sus cuatro compañeros abonan 500 € cada uno por un piso “con comodidades, sí”, pero por el que el propietario ingresa 2.500 € mensuales. No es un caso aislado: en Cáceres y Badajoz proliferan los anuncios de habitaciones que empiezan desde 100–140 € y suben con rapidez hasta los 300–400 € e incluso más si hay baño privado o ubicación “prime”. Fuente:  Idealista

Los números fríos del mercado

Extremadura marcó en agosto un precio medio de alquiler de 7,3 €/m², con Badajoz y Cáceres en esa misma horquilla (la capital cacereña ronda 7,9 €/m²). Puede parecer “moderado” frente a otros territorios, pero la presión en zonas universitarias dispara las rentas por habitación. Resultado: pisos estándar de 90–100 m² en barrios demandados se sitúan con facilidad entre 650 y 850 €, que, fraccionados por cuatro, empujan a esas cuotas de 200–300–600 € según calidades y localización.

La beca de residencia… y el agujero del mes

Este curso la cuantía fija de residencia de las becas generales sube 200 €: el tope pasa a 2.700 € (no puede superar el coste real del alojamiento). Traducido: 225 € al mes si contamos 12 meses; insuficiente cuando muchas habitaciones reales se mueven por encima de 300–400 €.

¿Ayudas al alquiler joven? Sí, pero…

El Bono Alquiler Joven estatal ha funcionado a trancas y barrancas. El Gobierno ha puesto sobre la mesa elevarlo a 300 €/mes (200 € por habitación) y permitir prórrogas hasta cuatro años en el próximo plan de vivienda; buena noticia… si se ejecuta y llega a los estudiantes que comparten piso. Hoy por hoy, la pancarta del campus no exagera: la beca se esfuma en el alquiler. Oferta real: mucha búsqueda, poca ganga

Los portales muestran decenas de habitaciones “para estudiantes” en ambas capitales, con mínimos desde 100–140 € pero con picos que rebasan con holgura los 300–350 €. En vivienda completa, los listados de Cáceres y Badajoz arrancan desde 425–400 € “para entrar”, y suben con rapidez si se pide ascensor, climatización o cercanía a facultades. Idealista

Lupa DEx

1) La aritmética que no cuadra

  • Beca residencia (tope 2.700 €)225 €/mes.
  • Habitación habitual en zonas universitarias: 300–400 €.
  • Diferencia mensual para el estudiante: 75–175 € (sin contar suministros, fianzas y meses “muertos”). Conclusión: la ayuda alivia, no resuelve. (Becas al Estudio)

2) Mercado “barato”… salvo donde hace falta
El promedio de 7,3 €/m² en Extremadura es de los más bajos del país, pero la media engaña: la microtensión en barrios universitarios saca rentas “por habitación” que multiplican el €/m² y castigan bolsillos jóvenes. (Idealista)

3) Políticas: del titular a la llave
Anunciar 300 € de bono joven y parques públicos suena bien. El reto es que llegue a tiempo, que se coordine con la Junta y que no se pierda en trámites mientras el estudiante paga ya. Propuestas realistas en el campus:

  • Límites y referencias de precio en radios universitarios (zonas tensionadas).
  • Residentes universitarias públicas y concertadas con cupos y precios tasados.
  • Deducciones autonómicas al alquiler para estudiantes desplazados con contrato legal (incentivo a aflorar economía sumergida).
  • Mediación municipal casero–estudiante con modelos de contrato tipo y registro rápido.

4) A pie de piso

Mientras tanto, recomendaciones prácticas:

  • Contrato por habitación (evita responsabilidades cruzadas).
  • Inventario detallado y fotos de entrada.
  • Estimación realista de gastos (luz, gas, comunidad, internet) antes de firmar.
  • Comparar: en portales hay diferencias de 100–150 € por variables menores (distancia, muebles, calefacción). Idealista

Epílogo de pancarta

“¿De qué me sirve conseguir la beca si se la queda mi casero?” Hoy, de paraguas. Mañana debería ser palanca: o se ensancha la oferta asequible cerca de los campus, o la beca seguirá siendo un boomerang que sale de la administración… y aterriza en el bolsillo equivocado.