Juan Preciado para Digital Extremadura, Mérida, 30 de septiembre de 2025.- La presidenta de la Junta, María Guardiola, ha lanzado un órdago a la oposición al advertir que, si no logra aprobar las cuentas de 2026, adelantará los comicios. PSOE y Unidas por Extremadura califican la advertencia de “chantaje”, mientras Vox se desmarca y no acude a la reunión convocada en la Asamblea.
Guardiola defendió que no permitirá nuevos bloqueos que paralicen la región. “El escenario planteado es: o presupuestos para el futuro o que el futuro lo decidan y lo elijan los ciudadanos extremeños”, afirmó.
La líder del PP gobierna con 28 diputados, los mismos que el PSOE, mientras Vox cuenta con 5 y Unidas por Extremadura con 4. La falta de mayoría absoluta vuelve a colocar a la mandataria en un terreno frágil.
Respuesta de la oposición
El PSOE, a través de su portavoz Piedad Álvarez, aseguró que no teme un adelanto electoral, pero reprochó a Guardiola que “haya tardado en asumir que está en minoría y debe consensuar”.
Irene de Miguel (UPE) rechazó lo que considera un dilema falso de “presupuestos o elecciones” y admitió que no ve margen de acuerdo.
Vox, socio clave en la investidura, se ausentó de la reunión, negándose a sentarse junto al socialista Miguel Ángel Gallardo. Guardiola replicó que se les seguirá convocando y “ellos sabrán si vienen o no vienen”.
Cifras y calendario
El proyecto de presupuestos supera los 8.600 millones de euros, un 6,6% más que este año, con una previsión de crecimiento del PIB del 1,3%. La Junta planea registrar el texto en la semana del 15 de octubre.
La consejera de Hacienda, Elena Manzano, será la encargada de negociar al detalle con los grupos para acomodar propuestas.
Reforma para legislaturas completas
Guardiola anunció además que el PP registrará una reforma del reglamento de la Asamblea para que las legislaturas duren cuatro años, incluso si hay elecciones anticipadas. De este modo, se “adecuará al Estatuto de Autonomía” y se garantizará la estabilidad de los ciclos políticos.
Lupa DEx
La presidenta extremeña juega fuerte: presenta las cuentas como una prueba de confianza y amenaza con el adelanto electoral.
El pulso no solo es con la oposición, también con Vox, ausente en la reunión pero imprescindible para la aritmética parlamentaria.
Si la advertencia es un movimiento táctico o una decisión firme, lo marcarán las próximas semanas, con la negociación de unas cuentas que vuelven a poner a prueba la gobernabilidad de Extremadura.





