Más de un centenar de niños participan en el tercer turno del campamento urbano de Cáceres que se celebra durante esta primera quincena de agosto en el Pabellón Serrano Macayo en compañía de ocho monitores que pretenden inculcar a los chicos valores como el respeto o la tolerancia.
El campamento urbano está organizado por el Instituto Municipal de Juventud (IMJ) y es una alternativa de ocio saludable a través de diversas actividades como música, deporte, educación medioambiental, visitas guiadas a museos y a entornos naturales o aventuras, entre otras.
La alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado, ha visitado este jueves a los participantes del tercer turno para y ha acudido a la clausura de dicho campamento urbano en compañía del concejal de Educación, Pedro Muriel, y de la concejala de Urbanismo, María Eugenia García.
Esta actividad se inició el 1 de agosto y concluye este jueves, mientras que habrá un cuarto turno del 18 de agosto al 5 de septiembre que se desarrollará en el Pabellón San Jorge de la barriada cacereña de Pinilla.
Durante los días que dura el campamento urbano, los participantes realizan diversas actividades que van desde las acuáticas a las visitas guiadas a los museos de la ciudad, pasando por manualidades, globoflexia, juegos populares, torneos de fútbol y baloncesto o baile, entre otras muchas.
La alcaldesa ha dicho que el acto de clausura es un momento «entrañable» puesto que los niños «se emocionan y quieren volver a repetir una quincena más». «En este día de despedida, los participantes nos muestran todo lo que han venido haciendo en el campamento urbano», ha resaltado.
FOMENTAR LOS VALORES Y LA CONVIVENCIA
«Este año se ha hecho un especial hincapié en que los niños aprendan cuáles son sus derechos de la infancia, algo que en la clausura del anterior campamento pudimos comprobar que se van con la lección muy bien aprendida», ha apuntado la alcaldesa quien, además, ha añadido que «es muy importante fomentar los valores y la convivencia entre los niños».
Asimismo, ha concluido su intervención diciendo que el campamento urbano «facilita» que los padres puedan conciliar su vida laboral con la personal ya que, a través de esta iniciativa del consistorio, «tienen una oportunidad para divertirse en el verano cacereño».
Los niños, como agradecimiento, han ofrecido a la alcaldesa un baile que han preparado durante la quincena.