Polémica por la posible venta de la residencia de la presidencia de la Junta de Extremadura

Mientras el presidente Monago anunciaba este jueves que se iba a poner en venta lo que él denomina » palacio del Presidente», en la avda José Fernández López de Mérida, el propio alcalde emeritense Pedro Acedo afirma que no se debe vender, el PSOE indica que es una cortina de humo lanzada por el jefe del ejecutivo,el PP, que estas residencias no son la norma general, el SIEx a través de Antonio Vélez, dice no porque el edficio lo considera un símbolo del autogobierno y en las redes sociales hay un grupo de ciudadanos que piden firmas para que la casa del río , como l popularmente se conoce dicho edificio, no se venda.

Así las cosas, la polémica está servida y las redes sociales se ocupan del asunto de la posible venta del llamado » palacio presidencial» por el propio Monago, noticia que anunció  en el pleno de la Asamblea de Extremadura, donde por quinta vez explicaba sus viajes a Canarias cuando era senador, en un auténtico rifirrafe con el portavoz socialista, Valentín García, que le llegó a exasperar y al que llegó a decir que no le enseñaba los movimientos de su Visa » porque no me da la gana».

La residencia de la presidencia de la Junta extremeña ha sido valorada en dos millones de euros, y fue comprada en 1985 por cuarenta millones de las antiguas pesetas. Desde este jueves está puesta a la venta en el portal inmobiliaro elidealista.com, con amplio texto explicativo y profusión de imágenes de la casa,  de tres plantas, en una de las cuales vivieron los anteriores presidentes Rodríguez Ibarra y Fernández Vara, algo a lo que renunció el actual mandatario popular José Antonio Monago, que tiene fijada su residencia en la ciudad de Badajoz.

En esta misma edición y como noticias relacionadas a esta información, Digital Extremadura se hace eco de las reacciones del alcalde de Mérida Pedro Acedo que se niega a que se venda y del secretario general de los socialistas, Guillermo F. Vara,  que considera que tal anuncio es una cortina de humo lanzada por Monago.

Para Rosa, del PP, la ciudadanía extremeña no entiende que, en los momentos actuales, le tenga que «pagar la casa, la comida, la luz, el consumo del gas o cualquier suministro» al presidente del Gobierno de Extremadura y «a toda su familia».

Por su parte, desde el SIEX, Vélez califica esta vivienda como «un símbolo, un instrumento imprescindible para afianzar el autogobierno de un extenso territorio de 40.000 kilómetros cuadrados y escasa población», y «es vital para la funcionalidad de una gestión permanente, para ganar el futuro y el bienestar de los ciudadanos de Extremadura».

Asimismo, en las redes sociales, en concreto en facebook, y en el enlace
http://chn.ge/1uNAOs7?recruiter=45117383,

se recogen firmas para que la citada casa no se venda.