Tras las elecciones Generales del 20 de diciembre se ha producido en España una fragmentación de los representantes de los ciudadanos que se materializa de la forma siguiente :los del partido más votado no han obtenido una mayoría absoluta para poder gobernar y tienen que avenirse a pactar con los grupos menos votados o de menor entidad que en principio rechazan cualquier apoyo que signifique lo que ellos entienden por claudicación .Se produce incertidumbre y se especula acerca de cuál será la mejor solución al problema que se ha planteado. Estamos ante el sistema de acción colectiva y de cooperación necesaria en la que un partido con más votos puede quedarse al margen por el juego de fuerzas que los ciudadanos han señalado. En esta tesitura debemos recordar el sistema llamado Dilema del prisionero que trata de analizar los problemas de la optimización interactiva que se estudia con interés en las Ciencias Sociales. El dilema se usa para analizar comportamientos estratégicos en los que se advierte dependencia mutua , para poner como ejemplo el clásico conflicto de intereses individuales y colectivos de quienes toman decisiones y también a la hora de justificar los beneficios de la colaboración. Este dilema se expone, por tanto, cuando aparece algún desencuentro entre individuos o grupos de intereses.
El clásico dilema del prisiones es el siguiente: la policía detiene a dos sospechosos de haber cometido un delito. No existen pruebas suficientes, para condenarlos y tras haberlos detenido se los encierra a cada uno en una celda . El fiscal les visita por separado y les ofrece el mismo trato. Cada uno de ellos va ser interrogado sobre la culpabilidad del otro .Si uno confiesa y su cómplice no habla, este será condenado a la pena máxima que se eleva a diez años y por el contrario el delator quedará libre. Si ambos permanecen callados, los dos serán condenados a seis meses por un cargo menor y por falta de pruebas. mientras que si ambos confiesan tendrán seis años de condena. Cada preso puede optar por «colaborar» con el otro o «defraudar» acusándole de ser el autor del delito y librarse de la pena.
Desde el punto de vista del interés óptimo de los dos sospechosos, la elección que lleva al mejor resultado es que ambos prisioneros cooperen, no inculpen al contrario ya que de esta forma ambos cumplirán la mínima pena posible, es decir la moraleja de este tipo de ejemplos es maximizar el beneficio conjunto. Las estrategias egoísta dan peores resultados a largo plazo, en cambio las de cooperación son mejores para el interés de cada uno. Si esto es así, parece importante articular mecanismos para que las conductas de cooperación se generalicen.
En el campo internacional se produjo este espíritu de colaboración en las Comunidades Europeas, que acordaron renunciar a una parte de su soberanía nacional, a favor del surgimiento de una Comunidad Europea. Esto produjo un acatamiento de determinadas valoraciones que modificaron las expectativas de utilidad de cada Estado. Por esta razón, aunque un cierto curso de acción conduzca a mayores ganancias, puede no ser elegido porque conlleve menor utilidad.
Si observamos el caleidoscopio que se ha producido en el Congreso de los Diputados tenemos en realidad la misma situación del dilema expuesto: Si una formación política apoya al grupo mayoritario ,pierde su posición y es criticada por su rechazo anterior al pacto pero si no coopera, ni beneficia a los demás ni obtiene beneficio propio.
Es un problema que en la actualidad tiene al pueblo español , una incertidumbre, que solo produce malestar y preocupación por un futuro incierto y la incógnita de como han de resolverse de forma inmediata los problemas lacerantes que sufren muchos españoles como son el desempleo , la pobreza, el déficit de educación y a los que no les importa cuál sea el resultado obtenido de tales negociaciones, solo esperan que se resuelva cuanto antes la situación. Ya lo expresó extraordinariamente Ramón y Cajal en una larga frase que muchos han grabado sobre su retrato.»Se ha dicho, hartas veces que el problema de España es un problema de cultura.» «Urge, en efecto, si queremos incorporarnos a los pueblos civilizados, cultivar intensamente los yermos de nuestra tierra y de nuestro cerebro..» .En efecto, Urge que se resuelva la situación creada tras las elecciones, de tal manera que lleve consigo un beneficio para toda la sociedad española.
LA AUTORA ES ACADEMICA CORRESPONDIENTE DE LA REAL ACADEMIA DE JURISPRUDENCIA Y LEGISLACIÓN