Un programa de las actividades previstas en la Feria de San Fernando de Cáceres datado en 1920 es el documento elegido en el Archivo Histórico Municipal para exponerlo al público durante este mes de mayo, coincidiendo con las fiestas de la capital cacereña que se celebrarán a finales de mes.
El documento recuerda que desde 1896 se celebran las Ferias de San Fernando, continuadoras de aquellas ferias medievales que durante un mes al año concentraban en la vieja villa el comercio ganadero y de otros productos de subsistencia de los que Cáceres era deficitario.
Las nuevas ferias siguieron teniendo un importante contenido ganadero aunque su aspecto comercial y de ocio fue imponiéndose hasta llegar a las actuales ferias con un componente estrictamente festivo.
El ‘Documento del mes’ es el cartel del programa de las ferias de 1920. En él se puede observar cómo el apartado festivo gana terreno sobre el ganadero. Se programan diferentes actividades lúdicas como el concierto de música de la Banda Municipal de Madrid, las proyecciones de cinematógrafo en la Plaza Mayor, los fuegos artificiales o las cucañas y elevación de globos.
Además, los teatros ofrecían funciones especiales y la banda militar del Regimiento Segovia 75 recorría las calles ofreciendo una denominada Retreta Cívico-Militar junto a las dianas de la Banda Municipal de Cáceres. A esto se unían los puestos de turrones, baratijas o golosinas instalados en la Plaza Mayor o los circos, carruseles y demás artilugios que se colocaban en la Plaza de San Juan.
En cuanto a los festejos taurinos, cabe destacar que cuando ya estaba contratado para dos corridas la figura del momento, José Gómez ‘Gallito’, que ofrecería un mano a mano junto a otra de las figuras del momento, su cuñado Ignacio Sánchez Mejías, un toro le quita la vida el 16 de mayo en Talavera de la Reina, por lo cual en pocos días hay que cambiar el cartel.
Entonces, se recurre a toreros consagrados como Belmonte, Chicuelo o Varelito pero ninguno tiene esas fechas libres por lo cual se contrata al torero extremeño Angelete que junto a Sánchez Mejías y Valencia serán los que amenicen las tardes de toros en la Era de los Mártires en ese año, según recuerda el Consistorio cacereño en nota de prensa.
Las ferias de 1920 se sufragaron a través de suscripción popular, en la que tenían un papel importante los comerciantes e industriales de la ciudad, especialmente los taberneros y dueños de cafés que aportaban importantes sumas para la celebración ferial. Por ello, aunque las corridas costaron un total de 65.705 pesetas, al final hubo un superávit de más de 3.000 pesetas.
La feria ganadera se desarrollaba en el Rodeo, donde se celebraba el concurso de ganados, que permitía que fuesen miles los forasteros que pasaran por la ciudad durante los días festivos para disfrutar de sus Ferias y Fiestas de San Fernando.