El Consejo de Gobierno ha aprobado el decreto que establece las bases reguladoras de las ayudas a la implantación de sistemas de riego que promuevan el uso eficiente del agua y de la energía en explotaciones agrarias.
Se pretende con estas ayudas, por un lado, fomentar la realización de obras, instalaciones y cambios en los métodos o sistemas de riego que mejoren la eficiencia en el uso del agua o fomenten el ahorro de energía en las explotaciones agrarias de regadío.
Y, por otro lado, la puesta en riego de explotaciones de secano mediante la implantación de métodos o sistemas eficientes de riego (aspersión, microaspersión, goteo, exudación) que propicien la economía del agua con el fin de mejorar la viabilidad y competitividad de las explotaciones agrarias.
Las inversiones auxiliables estarán relacionadas con la implantación de sistemas de riego que consigan los objetivos de este decreto, es decir, que sean eficientes en el uso del agua y de la energía, así como la realización de obras, mejoras e instalaciones en la captación, casetas de riego, balsas de riego, instalaciones de bombeo, transporte, regulación y distribución de agua, instalaciones de generación de energías renovables para riego, filtrado, fertirrigación, automatización y telecontrol.
En el caso de la transformación de secano en regadío serán subvencionables las inversiones de ampliación de la superficie regable de la explotación que vayan a utilizar recursos procedentes de masas de agua subterráneas o superficiales.
Las ayudas consistirán en una subvención de capital para la ejecución de las inversiones. La cuantía máxima de la ayuda será del 40% de la inversión subvencionable, porcentaje que podrá ampliarse en determinados casos, con un límite de 200.000 euros por beneficiario.
Ayudas para mejorar infraestructuras y productividad en fincas rústicas de propiedad municipal
El Consejo de Gobierno ha aprobado un decreto por el que se establecen las bases reguladoras de las ayudas para la mejora de las infraestructuras y de la productividad en fincas rústicas de propiedad municipal.
El decreto establece dos líneas de ayudas: una para inversiones destinadas a contribuir al mantenimiento y mejora de las infraestructuras rústicas, y otra para inversiones destinadas a la mejora de la viabilidad de las explotaciones agrarias mediante la modernización de instalaciones y equipos, el incremento de la productividad y el desarrollo de nuevas orientaciones productivas.
Podrán acogerse a estas subvenciones los ayuntamientos propietarios de fincas rústicas ubicadas en Extremadura, que deberán destinarlas a realizar pozos de sondeos, charcas, abrevaderos y otras instalaciones para la captación de agua, instalación y construcción de cerramientos perimetrales, naves polivalentes y construcciones agrícolas y ganaderas (incluyendo invernaderos e instalaciones para la defensa de los cultivos), entre otras instalaciones.
En el caso de la segunda línea de ayudas se subvencionarán también las instalaciones de riego complementarias a la captación tales como control, regulación, fertirrigación, distribución, automatización y telecontrol, así como el suministro de utillaje y maquinaria agrícola
La cuantía de las subvenciones oscilará entre 1.500 y 75.000 euros para las ayudas incluidas en la primera línea; y entre 50.000 y 150.000 euros para las actuaciones incluidas en la segunda línea de ayudas.