Ecologistas en Acción denuncia el impacto de las alambradas sobre la Fauna

Ecologistas en Acción espera de Parques Nacionales que «realice un estudio sobre el impacto en la fauna contra las alambradas y si compensa la imposición artificial y manipulada por el hombre para gestionar la naturaleza».

Ecologistas en Acción de Granadilla, ante la
instalación de múltiples cercados de 
alambradas en el pinar de la finca que lleva el antiguo nombre de la
villa, denuncia” el impacto sobre la fauna, especialmente la privación de
alimento para ciervos, ciervas y corzos, que sufren una gran bajada de
territorios de alimento en dichos cercados 
y  la eliminación masiva de
matorral mediterráneo”, según señalan en un comunicado de prensa remitido a
DEx.

Según informa el portavoz de Naturaleza de la
asociación, Carlos Pino, también “se ven afectados gran número de aves, entre
las destacan las rapaces, como el azor, el águila pescadora, águila real,
águila imperial y águila perdicera, que chocan contra los vallados de alambre y
sufren lesiones en su mayoría graves, que les conducen a la muerte”.

Estas rapaces son atraídas a los cercados con
conejos reintroducidos para conseguir su asentamiento en el pinar, sin haberse
realizado un estudio previo sobre las alambradas en el pinar de Granadilla
gestionado por Parques Nacionales. Además, la asociación considera un “grave
error la instalación de tantos metros cuadrados de alambradas en un lugar de
interés comunitario”, agregan.

Ecologistas en Acción Granadilla crítica
estas alambradas instaladas con fondos europeos para “el aumento de conejos, y
considera que sería más beneficioso para el ecosistema, que lleva ya décadas
siendo un punto clave de biodiversidad en el sistema central por la depredación
de linces sobre cérvidos y el aprovechamiento de sus restos por buitres
leonados y buitres negros con una de las mejores poblaciones de estos en dicho
paraje y alimoches, además de contribuir la carroña a suplementar la
alimentación del águila real y el águila imperial”.

Aseguran que la finca Granadilla es y debe
seguir siendo un “enclave especial por la fauna que mantiene sus nichos
ecológicos, al constituir un paraje singular en el que disfrutar de la
naturaleza, en paseos por sus cortafuegos, que poseen unos recursos naturales
únicos en Europa y, además, de dominio público”.