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Mou ¿ por qué no te callas?

DEPORTES
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Se lo dijo, casi implorando, Florentino: Te callas, desapareces de la primera fila de las broncas, dejas que hablen los jugadores y mantente en segunda fila hasta ver qué ocurre con los resultados y decidiremos en el futuro. Y Mou calló, pero aún quiso demostrar su poder humillando a Casillas, destrozando a Adán y dándole cuerda al denostado Kaká. El silencio del portugués ha desembocado en “pacto de jugadores” , victorias sobre el eterno rival, el Barcelona, y sobre el Manchester United en Chanmpions. ¿Todo esta arreglado?. ¿Hay paz en el Real Madrid? ¿ Se queda dos años más Mourinho?.

Hay escenificaciones que hablan de futuro: Ese manso Mou (parecía Karanka) elogiando al United, babeando hasta extremos desconocidos en su carácter, el juego de los ingleses, y ¡sorprendente! diciendo que su equipo no jugó y que perdió el mejor, sólo se pueden interpretar como “un guiño a su deseo irrefrenable de irse a la Premier y, si pudiese, de sustituir a Ferguson”. Les echó una mano el árbitro, no lo duda casi nadie, (quizás ahora se dedique a acusar menos al Barcelona, los “regalos” por lo visto van por todas partes, hay para todos) pero tras la victoria lo que merecen sus jugadores es una palmadita en la espalda, un toque de ánimo, de felicitación, aunque sea en la rueda de prensa… No fue capaz. Su cabeza ya navega por otros mares futbolísticos, aunque tenga que hacer el paripe en Madrid hasta el final.

Y quedó demostrado que al Real Madrid, si le juegan como lo hace él con el Barça, al contraataque, le crean muchas dificultades, se diluye. Ahora, pasados los octavos, es todo euforia: Modric es dios, Diego Lopez ya ha enviado al banquillo a Casillas y Kaká es la reencarnación de Zidane. De momento no ha ganado nada y su juego tampoco ha mejorado, pero las individualidades siguen sacando partidos adelante y la euforia (tabla de salvación para una hinchada dolorida y resentida por esos 13 puntos de ventaja del Barça en la Liga) se mantendrá altísima. La siguiente estación es el martes: Si el Milán elimina al Barcelona, que es muy probable, ya se hablará del poker madridista: dos al Barsa, el United, y el Milan a favor.

Pero ni antes el Real Madrid era tan flojo ni ahora es la divinidad. Todavía sufrirá mucho antes de levantar un trofeo esta temporada… aunque para ganarlo hay que estar ahí y, de momento, es finalista de la Copa del Rey y está en cuartos de la Champions. Lo indudable es que si Mou sigue calladito, las cosas van mejor.


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