Esta semana es el Debate sobre el Estado de la Región, que técnicamente se llama sobre orientación de la política general de la Junta de Extremadura.
Lo primero que os pido , si asi lo estimáis es que me hagáis llegar a los largo de hoy, mañana y pasado, vuestras opiniones y propuestas. Me valen las grandes propuestas y aquellas que afectan a las pequeñas cosas de cada día.
Lo segundo es lo que espero del mismo. Hoy hice una pequeña encuesta a pie de calle en Mérida, Hervás y Plasencia. La inmensa mayoría de los 37 a los que pregunté, coincidieron en que no nos perdonarían que entraramos en refriegas personales. Por eso espero que sepamos estar a la altura de lo que se nos pide. La situación es de tal magnitud , que probablemente no haya habido un debate que deba exigir a sus protagonistas más y mayor esfuerzo. Los extremeños y las extremeñas esperan de nosotros que les seamos útiles y resolvamos los graves problemas que tiene nuestra sociedad. Yo estoy dispuesto a trabajar en esa línea desde la cercanía a los problemas, y desde la experiencia, honestidad y coherencia . No puede ser un debate de ganadores y perdedores cuando hay tanta gente que lo ha perdido casi todo.