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La SEGG pide prudencia a la hora de sobrecargar a los abuelos en el cuidado de los nietos

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Ante la actual situación económica y la dificultad de conciliar la vida laboral y familiar, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) ha recomendado prudencia a la hora de sobrecargar a los abuelos en el cuidado de los niños.

[Img #29094]Cada vez son más las familias que piden ayuda a los abuelos para cuidar de
los nietos, sobre todo en horario extraescolar y vacaciones. De esta forma, los
abuelos han asumido, en las últimas décadas, un importante papel en la
organización y funcionamiento de los hogares y en la educación de sus nietos.


Tal es la situación, que la mitad de los abuelos españoles dedican una
media de seis horas al día en el cuidado de sus nietos, lo que supone, en
muchas ocasiones, más tiempo del que les dedican los padres a sus hijos.


Pero además de cuidar de los nietos y debido a la actual situación
económica, muchos abuelos colaboran en las tareas domésticas, lo cual supone un
gran ahorro en las economías familiares que se evitan el pago de servicios como
guardería, transporte escolar, comedor escolar, campamentos de verano o
servicio doméstico.


También ha aumentado el papel de “abuelo banquero” al que se
recurre para llegar a fin de mes, para dar un “empujón” a la hipoteca y, en
menor medida, para cubrir gastos de alimentación y vestido.

 

Según la SEGG, los beneficios de las relaciones intergeneracionales
son muchos. Los abuelos sacan provecho de esta situación, ya que el compartir
tiempo con sus nietos les hace sentir más vivos y útiles y, además de
combatir la soledad, es una oportunidad para vivir una “segunda paternidad.


También se benefician notablemente los pequeños, debido a que, mediante el
contacto con sus abuelos, los niños viven nuevas experiencias, descubren
tradiciones y nuevas aficiones, pero lo más importante de esta relación
con los abuelos es el valor y el respeto derivado del intercambio entre
personas de diferentes generaciones unidas por un vínculo afectivo.


 A pesar de estos beneficios compartidos, el presidente de la Sociedad
Española de Geriatría y Gerontología, José Antonio López Trigo, ha recordado
que hay que tener presente que cuidar de los nietos debe ser una actividad
placentera para abuelo y nieto, evitando que se convierta en una carga para la
persona mayor, ya que “esta
situación puede conllevar, a la larga, problemas de estrés, ansiedad o
depresión si los abuelos se ven sobrecargados de actividades y
responsabilidades con los nietos en detrimento de sus propias necesidades”.


Asimismo, ha recordado a los padres y
abuelos que deben ser prudentes a la hora de ejercer como ‘abuelos
canguros’ y deben tener presente que aunque hay abuelos cuya máxima aspiración es dedicar su tiempo a cuidar de sus nietos, las personas mayores tienen derecho a su vida y a disfrutar
de su tiempo libre. Además, según el caso y la edad, pueden tener mermadas
sus fuerzas y el cuidar de sus nietos puede ser agotador para ellos, aunque no
lo digan
, ha afirmado López Trigo.


DECÁLOGO DEL ‘ABUELO
CANGURO’


A la hora de asumir la tarea de cuidar a los nietos de la mejor forma
posible, la SEGG ha recomendado a los abuelos tener en cuenta este sencillo
decálogo.


De esta forma, ha aconsejado no sobrecargarse de labores; aprender a decir ‘no’;
no descuidar la salud; hablar con el hijo cualquier situación o problema;
reservar el propio espacio y tiempo; y mantenerse en buena forma física.


También ha recomendado no sentirse culpable si no se es capaz de realizar
tareas como antes; intentar hacer actividades con el nieto que se adecuen al
abuelo y reconforten a los dos; poner límites; y disfrutar del nieto.


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