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LA ESTELA DE LA JUEZ CORO CILLÁN EN EXTREMADURA

OPINIÓN
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[Img #30812] El
Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha condenado a la juez de Instrucción
número 43 de Madrid, María
del Coro Cillán García de Iturrospe
, a una pena de inhabilitación de 15
años para ejercer cualquier cargo público, al haberla encontrado culpable de un
delito de prevaricación en la administración judicial de la discoteca madrileña
Moma, y a 18 años de multa a razón de 15 euros diarios.

            

Conocí, y entrevisté para El
Periódico Extremadura, a Coro Cillán a principios de los 80 cuando colaboraba
con Carlos de Villamor Maquieira en el Departamento de Derechos Humanos de la
Facultad de Derecho de la Universidad de Extremadura. Tuve con ambos una
relación profesional y amistosa. Con Villamor mantuve una entrevista sobre los
derechos humanos, sobre los que el presidente estadounidense, Jimmy Carter
(1977-1981) basaba su política exterior en su relación con los estados centroamericanos.
La profesora Cillán organizó una jornadas en torno a uno de los padres de la
Constitución de Cádiz de 1812, «La Pepa», el extremeño Diego Muñoz
Torrero (Cabeza del Buey, 1761-Oeriras e S
ão
Julião de Barra, Portugal, 1829), cuya comisión ponente presidió y pronunciare
el discurso con que se iniciaron la sesiones de las Cortes. Se preguntaba, y me
interrogaba –no sin razón– si los extremeños conocíamos al ex rector de la
Universidad de Salamanca, que trazó las ideas fundamentales de la Constitución
en ciernes, revolucionarias para un clérigo de la época, y cuyo bicentenario se
cumpliere el pasado año.


            Coro Cillán principió en Extremadura
su carrera política y universitaria, que después derivó a la judicial. Delegada
de la Vivienda en Badajoz
, cesó en su cargo por Real Decreto 974/1977, de
23 de abril. Por Decreto 950/1977 fue nombrada delegada provincial del mismo
Departamento en Ávila. Por
Resolución de 8 de abril de 1986, del rector de la Universidad de Extremadura,
es nombrada profesora titular de Universidad, del área de conocimiento Derecho
Constitucional
, en virtud de concurso.


            De la enseñanza pasó a la
judicatura. Antes de ser magistrada del Juzgado de Instrucción número 43 de
Madrid, en las elecciones generales de 1979 formó parte de una candidatura
denominada Unión Foral del País Vasco; no salió elegida y después se hizo juez.
Su carrera
judicial
ha estado salpicada de desencuentros con sus superiores. En 1999,
el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) le impuso una sanción de 100.000
pesetas por una falta grave al dictar sentencias con retrasos injustificados.
En 2002 fue sancionada por el pleno del CGPJ por falta muy grave, por retraso
injustificado y reiterado en 34 procedimientos de apelaciones civiles y en 14
penales, por lo que fue sancionada con dos años de suspensión, aunque,
recurrida, el tribunal consideró que la sanción le fue impuesta fuera de plazo
y ordenó restablecer sus derechos. En 2003, mientras cumplía la anterior
sanción, el CGPJ acordó suspenderla en sus funciones por otro año más, aunque
el Supremo sustituyó la suspensión por una multa de 1.800 euros. En abril de
2011 abrió diligencias previas contra los organizadores de una procesión atea,
convocada por las calles de Madrid el día del Jueves Santo. El mismo mes y año
dictaminó el sobreseimiento libre y archivo de la querella interpuesta por el
doctor Luis Montes contra el ex consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid,
Luis Lamela, por un presunto delito de denuncia falsa. Durante más de dos años
instruyó una causa contra el jefe de los TEDAX, el comisario Juan Jesús Sánchez
Manzano, por posible destrucción de pruebas, que sobreseyó la Audiencia
Provincial de Madrid. Desde el 15 de octubre de 2012 estaba imputada por el
Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid por prevaricación
continuada en el «caso Moma» por dar un trato de favor a una de las
partes implicadas, por el que ha sido condenada. «Por
mis santos cojones se precinta Moma»
, y por ello y por esa causa, ha
sido condenada.


            Fuera del ámbito político y
judicial, Coro Cillán dejó a su paso por Extremadura una obra científica
recogida en los Anuarios de la Facultad de Derecho y en otros libros, en los
que abordó el incipiente Derecho autonómico, como: «El sistema de partidos
políticos en la Extremadura actual» (1985) o «El reglamento de la
Asamblea de Extremadura» (1985), además de otros ensayos sobre los
reglamentos y grupos parlamentarios.


            Ya le previno la fiscal en el caso
Moma: «Coro,
te estás metiendo en un lío»
. Y el lío, por sus «santos
cojones», le ha chamuscado su carrera judicial.


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