La Ongd ONGAWA, que centra su trabajo en el empleo de la tecnología para el desarrollo humano, ha organizado una acción de calle denominada “Tira el cable” que tendrá lugar este sábado día 26 en el Paseo de Cánovas de 11 a 14 horas
Quiere
recordar con ésta campaña cómo una práctica de consumo responsable de aparatos
electrónicos contribuiría a reducir sensiblemente los impactos negativos que
actualmente conlleva el uso de este tipo de productos.
El
hecho de que haya prácticamente casi el mismo número de personas en el mundo
que el número de aparatos de telefonía móvil, señalan desde la organización, obliga a reflexionar y a actuar para una
fabricación, distribución y consumo responsables de aparatos de última
tecnología.
Algunos
de los impactos negativos vinculados a la producción, distribución, uso y
posterior deshecho de productos electrónicos detectados son los impactos
vinculados a la extracción de materias primas: en la República Democrática del
Congo, por ejemplo, existe un conflicto armado vinculado al control del coltán,
un recurso imprescindible para la producción de electrónicos.
Los
impactos vinculados a la producción de electrónicos: existen numerosas
evidencias de violaciones de los derechos laborales en fábricas que producen
electrónicos en diferentes partes del mundo.
Los
vinculados al uso, especialmente al consumo de energía que se produce incluso
cuando estos productos están apagados.
Y
los impactos tras la vida útil de los productos electrónicos: en Europa
producimos 15 kg. de basura electrónica por persona al año, de la que se estima
que sólo se trata adecuadamente el 25%.
Ante
estos datos, ONGAWA apela a que como consumidores aprovechemos nuestra
capacidad para poder modificar pautas y actitudes en el uso y consumo de
tecnología.
Acciones
como el aprovechamiento máximo de nuestros aparatos antes de cambiarlos, la
selección para adquirir productos de fabricantes más respetuosos con el medio
ambiente y derechos de las personas, reducir el consumo diario y dependencia de
determinados aparatos para evitar el aumento exponencial de “basura
tecnológica” (uno de los crecientes problemas medioambientales) y apostar por
reparar nuestros productos o reutilizarlos, son acciones muy fáciles de llevar
a cabo y que están al alcance de todas las personas.
Si
a esto acompañamos una sensibilización e información sobre estas pautas a las
personas de nuestro entorno más cercano, estaremos haciendo mucho en favor del
medio ambiente, el respeto a los derechos humanos y la lucha contra la pobreza.
