Digital Extremadura
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[Img #32688]Todo el mundo se esfuerza en mostrar
un escaparate atractivo, en crear ese nexo que haga posible la relación,
 ese punto común que crea la empatía, y tras él
suelen venir los intercambios, los buenos resultados económicos, y la calidad
de vida. No se ama nada que no se conoce.


Hay que reconocer que desde principios
del siglo XX, con el caciquismo y posteriormente con el franquismo que produjo
una despoblación, terrible, haciéndonos perder uno de los activos más
importantes como fue la juventud, se creó una imagen de Extremadura como de
región atrasada, (doy fe de ello, por los comentarios de amigos y conocidos, cuando
dije en Valencia desde donde llegué, que venía para Extremadura, para una
estancia puntual.( Hice  real el dicho
del emperador  Adriano; Nada ha durado
tanto en mi mandato más, que lo provisional)  Tan es así, que al pasar por las Vegas,
pregunté en Santa Amalia, si me encontraba en Badajoz, como mi plano indicaba,
o bien me había equivocado de provincia, porque aquella frondosidad de árboles
y cultivos, no correspondía a la idea que me había hecho, tras lo que me habían
contado), que en la mente de muchos se identificaba casi en su totalidad con la
película de  Buñuel, “Tierra sin pan”,
rodada en un primer momento en 1932 muda, y que posteriormente se sonorizó. El
impacto en un Buñuel surrealista, en esos momentos, fue enorme y tras rodarla,  le llevó  hacia un cine más costumbrista y social, aunque
algunos opinen, que ciertas escenas, no dejan de ser surrealistas, pero descubrir
que el surrealismo real de la vida, superaba al imaginado, influyó de modo
decisivo en su carrera y su forma de hacer cine.


Pero toda esta imagen de una
Extremadura pobre y casi mísera, acomplejaba, y sigue haciéndolo, a muchos
emigrantes o sus hijos. Sólo después de muchas reuniones y conversaciones, en
las que transmitía, personalmente, a mis compañeros de trabajo, las bellezas de
Extremadura, sus productos, que yo regalaba para  degustar en los “coffee break” ( los
descansos), dos de ellos me declararon que habían nacido en  Extremadura, pero nunca lo habían dicho, ni
habían vuelto. Debí de ser muy convincente porque a petición de varios, la dirección
propuso hacer una de estas reuniones, en Cáceres, en lugar de las  habituales  en Madrid, o Barcelona. Descubrieron todos,
los magníficos marzos extremeños, la belleza de nuestro campo, la excelente  gastronomía a precios razonables y la riqueza
monumental e histórica, de la que me convertí en cicerone, y que les despertó  una envidia, (que no sé si era muy sana)
comparando lo bien que se vivía en Extremadura, con los agobios y mayor coste
de vida, de las grandes ciudades. Sé de alguno que adquirió una casa en la
Vera, tras darse una vuelta, en vacaciones, recorriendo Extremadura.


Activos exportables, en eso que
llamamos Patrimonio Inmaterial, tenemos muchísimos,  cuando oigo lo de; las “Comunidades
históricas”, me entra una risita nerviosa por la tontuna, y un pesar, al
reconocer que sesudos personajes tuvieron que transigir con semejante idiotez,
para que hubiera consenso, en una versión política y penosa, de la famosa frase;
“vale, admitimos pulpo como animal de compañía”.


El día
10 se celebraba, con la grandiosidad y el cariño de emeritenses y foráneos,  el día de Santa Eulalia. Si afirmara, como se
pretende por la Asociación de la Mártir, que la figura de  Santa Eulalia, sea declarada por la Unesco
como Bien Inmaterial de la Humanidad, alguno diría. ¡Os habéis pasado¡ Pero es
evidente, que para atreverse a ello sin hacer el ridículo debe haber un bagaje
importante de argumentos que lo sustenten. Uno de ellos, es, que solamente en
España y Portugal, hay más de 576 lugares y poblaciones que llevan el nombre de
Eulalia u Olalla. A esto deberían apuntarse muchas otras poblaciones de
Hispanoamérica, e incluso, en algunas de ellas la tuvieron como patrona principal
de la ciudad, pero la pérdida,  a través
de los años, del conocimiento de los orígenes la han relegado a un segundo
plano. Y  se podrían contar otros
lugares, como Francia. Son muchos los que hacen coincidir el origen del Camino
de Santiago, en la larga tradición de las peregrinaciones al sepulcro de la
Mártir emeritense, que originaría la construcción del Xenodochio, el hospital
de peregrinos que fundó el visigodo obispo Mausona.  No en vano, Santiago, tras la invasión
musulmana, se convirtió en la depositaria, hasta que fuera nuevamente
cristiana, de la sede episcopal de Mérida. Pero Eulalia, no sólo es patrimonio
de la Iglesia Católica. En Oviedo está la Iglesia Anglicana de Santa Eulalia de
Mérida, y el pasado año, 
el pope Andrey Kordochkin había manifestado al
arzobispo de Oviedo,  el deseo de
disponer de una parte de las reliquias de Santa Eulalia, por pequeña que fuera,
que habían sido traídas  en el siglo VIII
por el rey astur  Silo, desde Mérida; “
Cuenta Bernabé Moreno de Vargas cómo
el rey Silo, según Ambrosio de Morales, hizo una «escapada» y llegó
hasta Mérida trayéndose las reliquias de Santa Eulalia. «El rey Silo
trujo de Mérida el cuerpo de esta santa, con un pedazo de cuna que había sido
criada. Todo lo metió en caja de plata y lo puso en la Iglesia de S. Juan
Evangelista y de otros apóstoles…Después el rey D. Alonso el Casto trasladó
de allí sus reliquias y las puso en la iglesia mayor de Oviedo
«
. Así, una reliquia de la mártir emeritense se venera
en una capilla de  la mayor iglesia
ortodoxa de Madrid.


Quizás todo
esto respalde, el por qué ,  Eulalia fue
la patrona de Hispania, y su icono, tuvo una gran importancia en la Reconquista
española, y si hemos de hacer caso a Ambrosio de Morales,(s. XVI)  capitaneó en un primer momento el espíritu de
la Reconquista, gritando d. Pelayo su nombre para enardecer a los combatientes
en la Batalla de Covadonga.


Hay mucho  por
lo que sacar pecho, y si todo esto lo supieran nuestros  acomplejados paisanos de Cataluña, también
les entraría la risa tonta  cuando les
hablaran de las Comunidades Históricas y del Secesionismo


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