La UEx patenta un procedimiento de refuerzo de bóvedas para rehabilitación de edificios

La Universidad de Extremadura ha licenciado, para su explotación comercial, la patente “Material Ecológico de Refuerzo en bóvedas de construcciones preexistentes, y procedimiento asociado al mismo» a la empresa cacereña Restaura S.L. (Restauraciones y Rehabilitaciones Especiales S.L.).

[Img #33800]Esta
patente fue registrada en la Oficina Española de Patentes y Marcas por la
Sección de Gestión de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI) de la
Universidad de Extremadura quien ha participado en las negociaciones de la
licencia de explotación.

 

La
patente lleva aparejada una doble invención. Por una parte, sus inventores, los
profesores José Carlos Salcedo Hernández, Manuel Fortea Luna y Juan Saumell
Lladó, han diseñado un procedimiento para reforzar bóvedas.

 

Por
otro lado, esta invención se ha completado con el desarrollo de un material de
hormigón especial de cal, capaz de consolidar estructuralmente, no sólo bóvedas
de construcciones, sino también los muros de edificios de mampostería ya
existentes.

 

El
hormigón es utilizado desde la antigüedad. Obras como el puente de Alcántara
(Cáceres) y otras romanas están construidas a base de hormigones.

 

Sin
embargo, en los últimos cien años la utilización masiva del cemento Portland ha
condenado al ostracismo las técnicas utilizadas en otras épocas, que pueden
seguir siendo adaptadas tecnológicamente a las nuevas necesidades en la
rehabilitación de edificios. Hay que recordar que casi el 50 % del patrimonio
construido está realizado con fábricas de mampostería.

 

Como
aportación al mantenimiento del patrimonio edificado, este equipo de
investigadores de la UEx ha desarrollado este hormigón de cal tecnológicamente
más avanzado, capaz de resolver los problemas estructurales y dotar de
seguridad en las construcciones de ladrillo y piedra, según ha explicado el
investigador Salcedo Hernández.

 

CONGLOMERADOS NATURALES

  

Este
hormigón es una mezcla de varios conglomerantes todos ellos naturales y es
compatible con las mamposterías en las obras de rehabilitación en las que se
pretende intervenir.

 

Este
compuesto se dosifica para tener el mismo peso y resistencia que el material
original y posee una menor fragilidad: antes de romperse registra una
deformación del doble que un hormigón convencional, lo que proporciona mayor
seguridad en rehabilitación y ante nuevas acciones, como los seísmos.

 

Como
ha explicado el profesor Salcedo, “hubo un hecho que nos dirigió a patentar el
sistema: El terremoto de Lorca de 2011”. Tal y como explican, allí se demostró
que “las estructuras que fallaron fueron las de los edificios del patrimonio
histórico que habían sido rehabilitadas con hormigones nuevos de cemento
portland”.

 

Así,
como ya han acreditado en laboratorio el excelente comportamiento estructural
sísmico del nuevo material (propiedad conocida como “ductilidad”), “creen que
el sistema y el material que proponen, podría tener éxito”.

 

El
material resultante en laboratorio es ecológico por tres cuestiones: porque no
emplea cemento portland convencional (de fabricación muy contaminante) sino
conglomerantes naturales (obtenidos de piedra natural con menor temperatura),
porque los áridos utilizados proceden en parte de reciclaje de productos y,
sobre todo, porque en lugar de «tirar para hacer nuevo” el edificio
existente, se consolida (rehabilita), lo que supone un gran ahorro de
presupuesto de obra, de energía y de residuos de demolición.

 

En
este sentido, el responsable de la empresa Restaura S.L, Francisco Prieto
Ortuño, ha indicado que este invento que ahora ellos comercializarán “viene a
solventar una necesidad existente en el mercado de la rehabilitación, tiene una
gran potencialidad, tanto en el ámbito nacional como en el de otros países con
patrimonio arquitectónico, no se utiliza nada similar, de hecho las soluciones
que se han ido poniendo en obra no siempre han funcionado bien, a veces han
agravado los problemas y este sistema supone una situación esperanzadora”.

 

El
rector, Segundo Píriz, ha agradecido la confianza del empresario
Francisco Prieto para “sacar a la calle una patente de la Universidad de
Extremadura. 


En estos momentos, la UEx registra 92 patentes con alto
crecimiento experimentado en los últimos años.