Fernández ha realizado estas críticas tras la reunión mantenida este jueves con la consejera de Educación, Trinidad Nogales, para tratar sobre el desarrollo autonómico de dicho currículo de primaria, encuentro que ha agradecido, aunque ha lamentado que antes de la citada reunión ya se había hecho pública la posición del gobierno en relación con el desarrollo del citado currículo
«Sin que, aunque solo fuera por cortesía, el resto de los grupos
parlamentarios de la Asamblea de Extremadura y, por supuesto, las
organizaciones sindicales del sector educativo de la región la
conocieran», ha indicado.
En nota de prensa, los socialistas han rechazado el procedimiento
seguido por la consejería, al considerar que el desarrollo curricular de
Primaria «ya ha sido decidido unilateralmente por el gobierno del PP,
practicando como siempre la política de ‘son lentejas, o las comes o las
dejas'».
El portavoz socialista ha reiterado la voluntad de su grupo de
iniciar una «verdadera negociación» que conduzca a una «posición de
consenso» sobre el currículo de Primaria, con la participación de los
representantes sindicales y de la comunidad educativa de la región,
especialmente de las asociaciones de madres y padres, ha indicado.
Asimismo, el Grupo Parlamentario Socialista ha reiterado ante la
Consejería de Educación su «rechazo frontal» a la Lomce aunque, como
«muestra de su voluntad de colaboración y de su responsabilidad
política», ha presentado una serie de propuestas referidas al currículo
de Primaria.
Entre esas propuestas destacan establecer medidas que compensen
las «dificultades que se presentarán» tras la división en dos del
antiguo área de Conocimiento del Medio; ofrecer la Educación para la
Ciudadanía y los Derechos Humanos como asignatura de libre configuración
autonómica; y asignar una hora semanal a la asignatura de Religión.
También están entre las propuestas exigir que la comunidad
autónoma pueda intervenir en el diseño de las pruebas y en el
establecimiento de los contenidos y criterios de evaluación; que sea el
profesorado de la enseñanza pública el que realice y califique las
pruebas de evaluación; y que los tutores permanezcan durante dos
cursos, como mínimo, con su alumnado.