Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil han detenido a siete personas y ha imputado a otras tres por supuestos delitos contra la protección de la fauna en la provincia de Cáceres.
Las
actuaciones se han desarrollado desde noviembre de 2013 y hasta el 1 de abril
de este año, en el marco de una campaña coordinada para controlar y detectar
posibles irregularidades que, durante el transcurso de las actividades
cinegéticas, se vienen produciendo durante la temporada de caza mayor en la provincia
de Cáceres.
En
el marco de esta campaña se han realizado 144 inspecciones de actividades
cinegéticas, que han dado como fruto la detención de siete personas, la
imputación de otras tres, así como la detección de 247 infracciones en materia
de caza y de sanidad animal, de las que se ha dado cuenta oportuna a la
Consejería de Agricultura para que sirvan de inicio a su correspondiente
expediente sancionador.
Entre
las actuaciones más destacadas, se encuentra la interceptación de un vehículo
en carreteras extremeñas, ocupado por cinco personas, que transportaban en el
maletero cinco trofeos de caza, cuatro de ellos compuestos por cabeza y
piel de corzo (capreolus capreolus), y
uno compuesto únicamente por la cabeza de un jabalí (sus scrofa).
Además,
ha explicado la Guardia Civil, oculto en diferentes compartimentos, se halló un
rifle monotiro, desmontado en piezas, así como una mira telescópica y un
dispositivo silenciador de fabricación artesanal.
Asimismo
transportaban una nevera portátil que contenía quince piezas de carne
deshuesadas, presumiblemente de las especies mencionadas, no acreditando en
ningún momento la lícita procedencia de dichos efectos.
Por
todo ello, los ocupantes del vehículo fueron detenidos como presuntos autores
de un supuesto delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales
domésticos, y se procedió al comiso y retirada de los trofeos y las piezas de
carne, así como del arma y demás efectos (mira telescópica, silenciador,
prismáticos, focos, linternas, cuchillos y munición) empleados supuestamente
para la comisión de los hechos.
Entre
las actuaciones administrativas más significativas destaca la aprehensión de
doce piezas de caza de la especie ciervo común (cervus elaphus), por
incumplimiento de la normativa sobre control sanitario de especies silvestres,
por lo que fueron destruidos los
cadáveres e incautados los trofeos de caza existentes.
Respecto
a los delitos esclarecidos, el primero de ellos fue detectado en el término municipal
de Cáceres, al ser sorprendidas dos personas realizando una acción cinegética
en terreno clasificado como Coto Privado de Caza Mayor, careciendo del permiso
del titular del terreno y tras abatir un ejemplar de ciervo hembra, explica la
Guardia Civil.
El
segundo consistió en la caza de tres machos de cabra montés en el término
municipal de Piornal, como en el caso anterior, sin tener permiso del titular
del coto. Por la comisión de este delito resultaron imputadas tres personas,
acusadas de abatir cada una de ellas un ejemplar de la especie mencionada.