La Dirección General de Tráfico (DGT) en la provincia de Badajoz prevé para esta Semana Santa unos 60.000 desplazamientos en las carreteras pacenses, que suponen cerca del 4,5 por ciento más de los registrados el año pasado en estas mismas fechas.
El jefe provincial de Tráfico, Ignacio Martínez, ha presentado la
campaña especial de Tráfico de Semana Santa en el punto kilométrico
17,400 de la carretera EX-107, con motivo de la segunda fase de la
‘Operación Salida’ que arrancará oficialmente a partir de las 15,00
horas de este miércoles.
En declaraciones a los medios, Martínez ha concretado que durante
esta Semana Santa se llevará a cabo un control especial sobre las
carreteras secundarias o convencionales, dado que son las «más
peligrosas» y «donde se produce el mayor número de víctimas por sus
especiales características».
Entre ellas, ha mencionado tener «multitud de accesos» a
explotaciones agrícolas, ganaderas o industriales o a fincas
particulares, lo cual «es muy peligroso desde el punto de vista de la
circulación, especialmente de noche con baja visibilidad e incluso a
plena luz del día».
«Los accidentes en estos puntos son o suelen ser desgraciadamente
muy frecuentes, además son carreteras que tienen curvas más ceñidas, más
cerradas que las autovías, y por supuesto cambios de rasante que
impiden la visibilidad adecuadamente», ha apuntado.
Igualmente, ha informado que en la primera fase de la Operación
Salida de Semana Santa la provincia pacense ha registrado 13 accidentes,
todos ellos en vías secundarias, que han acarreado heridos leves en su
mayoría.
CONTROLES DE ALCOHOLEMIA, VELOCIDAD O INTERMITENTES
Del mismo modo, el jefe provincial de Tráfico ha adelantado que
unos 200 agentes de la Guardia Civil llevarán a cabo un número
«ilimitado» de controles de alcoholemia y droga, velocidad,
adelantamientos, maniobras peligrosas o utilización de los intermitentes
durante toda la Semana Santa con el objetivo de «estar presentes en la
carretera» y en concreto en aquellas «potencialmente más peligrosas para
reducir los accidentes».
Ante ello, ha lamentado que los dos pasados fines de semana han
sido «realmente muy dramáticos, como no se conocían desde hace muchísimo
tiempo», debido a un «repunte importante» de accidentes que ha achacado
a que «no» se respetan las normas de seguridad.
«No nos basta con echarle la culpa a la carretera: ‘es que la
carretera está muy mal, tiene baches’, muy bien, tiene baches,
esquívalos. ¿Cómo? Yendo a una velocidad adecuada al estado del firme.
Es tu seguridad, no le eches la culpa a otro, eres tú el que va a ir más
rápido, el que se va a saltar un stop, el que no va a llevar el
cinturón puesto, el que no va a llevar a su hijo en el sistema de
retención infantil adecuado, eres tú el responsable, eres tú el que no
va llevar el casco», ha insistido.
CARRETERAS PROBLEMÁTICAS
Acerca de las carreteras más problemáticas de la provincia,
Ignacio Martínez ha citado la EX-107, que cuenta con mucho tráfico y
«multitud» de accesos al centro penitenciario pacense o a distintas
empresas y ha recordado que «desde hace tiempo se viene pensando en que
podría caber la posibilidad de desdoblarla», pero que los recortes
económicos y los gastos que ello conllevaría «han hecho que se hagan
actuaciones puntuales para disminuir el riesgo».
«No obstante el riesgo no lo tiene la carretera, lo tiene el
conductor que no obedece las normas, lo tiene el conductor que cuando no
hay visibilidad suficiente circula a una velocidad inadecuada y las
maniobras que se pueden realizar», ha recalcado.
En general, ha afirmado que las vías con más movimiento de
vehículos en Semana Santa son la A-5, en la A-66 y la nacional 430, pero
que «prácticamente» todas las carreteras extremeñas registran
«movimientos internos», como la EX-107, la EX-100 o la EX-110.
Por último, Ignacio Martínez ha considerado que la distracción es
la «causa más fundamental» de accidentes en la provincia pacense y ha
lamentado que ésta puede conllevar salida de vía que, a su vez, puede
generar colisiones.
Al mismo tiempo, ha pedido «precaución» en la carretera y ha
insistido en que también se producen atropellos que, en «muchas»
ocasiones, se deben a que el peatón no se hace visible con chalecos
reflectantes o no circula adecuadamente contra la marcha de los
vehículos, salvo que haya una acera por el otro sentido.