El consejero extremeño ha defendido que el Gobierno regional está «totalmente en contra de esa subida», y a este respecto ha recordado los cinco recursos de inconstitucionalidad presentados contra otras tantas normativas de la reforma eléctrica aprobadas por el Ejecutivo central.
Echávarri ha hecho estas declaraciones este miércoles en Madrid,
donde ha participado las jornadas «La gestión sostenible del regadío»,
organizadas por Expansión y Sando, y donde ha intervenido en la mesa
redonda «El regadío en el período de programación 2014-2020.
Coordinación entre administraciones y oportunidades de financiación».
En este mismo encuentro, la Confederación Hidrográfica del
Guadiana (CHG) y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio
Ambiente (MAGRAMA), han puesto a Extremadura como «ejemplo de lo que
debe ser» la planificación en esta materia, con regadíos más sostenibles
y modernos, según ha informado el Gobierno extremeño en una nota de
prensa.
La Administración extremeña, ha dicho Echávarri, apoya las
reivindicaciones de los regantes contra esta subida, y ha presentado
alegaciones a los ministros de Agricultura y Energía, tales como un IVA
reducido, tarifas especiales para los regantes o diferenciar el coste
energético entre los meses en que se riega y los que no, según ha
informado el Ejecutivo regional en una nota de prensa.
«Tras las inversiones realizadas en la modernización del regadío
extremeño con la intención de conseguir la eficiencia energética, los
regantes se sienten ahora penalizados», ha insistido Echávarri, quien ha
añadido que los afectados «seguirán contando con el apoyo del Gobierno
regional».
PLANIFICACIÓN EXTREMEÑA
El consejero extremeño ha destacado en su intervención la
planificación que el Gobierno extremeño está haciendo para poner en
marcha 40.000 nuevas hectáreas de regadío. A este respecto, ha recalcado
la inversión de más de 20 millones de euros en infraestructuras de
riego, para actuar sobre todo en obras de modernización que supongan un
ahorro de agua y de electricidad para los regantes.
También se ha referido a la liberalización de 8.840 hectáreas de
la Zona Regable Centro; el desbloqueo de la tramitación para la
construcción de la presa del Golondrón; y los trabajos que se están
realizando para poner en servicio en torno a 20.000 hectáreas de regadío
privado en las zonas de Monterrubio de la Serena y Tierra de Barros.
«El regadío tiene que estar más modernizado; y ser más
diferenciado, productivo, tecnificado y sostenible», ha comentado
Echávarri; y sobre estas bases trabaja el Gobierno de Extremadura en la
planificación del regadío, para «seguir ampliando las zonas regables».
Es una «apuesta» del Ejecutivo regional, ha insistido, porque «el
regadío fija población rural, genera riqueza, y porque el 18 por ciento
de la superficie agraria útil de Extremadura genera el 60% de la
producción final agrícola».