El Ministerio de Fomento ha confirmado al Gobierno de Extremadura que ha autorizado la compra de los raíles para el montaje de los 160 kilómetros de vía ferroviaria de alta velocidad entre Badajoz y Plasencia.
La
licitación, aprobada el pasado viernes por el Consejo de Administración de Adif
Alta Velocidad, ronda los 20 millones de euros y se suma al resto de concursos
que se han impulsado desde febrero para la compra de las traviesas y el balasto
necesarios para instalar la vía.
La
Consejería de Fomento considera que se trata de una noticia muy importante para
Extremadura ya que, tras años de incumplimientos, los extremeños podrán ver por
fin cómo se adquieren y se montan las vías por las que circulará el tren rápido
extremeño.
Esta licitación ratifica el compromiso
suscrito en 2012 por los Gobiernos central y autonómico en el Plan de
Optimización del Ferrocarril en Extremadura, de poner en circulación un tren de
altas prestaciones que enlace a 200 kilómetros por hora Badajoz, Mérida,
Cáceres y Plasencia con Madrid en tres horas y media, en lugar de las seis
actuales.
“La
compra de los raíles autorizada por Adif tiene un componente real y muy
simbólico para la región ya que deja patente el compromiso de los Gobierno de
Mariano Rajoy y José Antonio Monago para poner a disposición de los ciudadanos
y las empresas lo antes posible una infraestructura ferroviaria para pasajeros
y mercancías estratégica para el desarrollo económico de Extremadura”, ha
destacado el consejero de Fomento, Víctor del Moral.
La
licitación se encuadra en un contrato conjunto para el suministro y transporte de
carriles para tres líneas de alta velocidad. Junto a la extremeña, están la
Antequera-Granada y la Alicante-Murcia. El importe total del contrato para las
tres líneas se eleva a 63,5 millones de euros.
En
concreto, el carril se destinará al montaje de vía de los tramos extremeños
Plasencia-Cáceres, Cáceres-Mérida y Mérida-Badajoz; a la línea de alta
velocidad Antequera-Granada y a los tramos Monforte del Cid-Murcia y Nudo de la
Encina del nuevo acceso ferroviario de alta velocidad a Levante.
El
contrato licitado contempla la laminación de 61.700 toneladas de carril en
barra de noventa metros (unas 2.000 para la línea extremeña), el transporte
hasta la planta fija de soldadura, la base de acopio o la traza, así como la
asistencia y medios humanos para la descarga de las barras. En función de las
necesidades de la obra, Adif Alta Velocidad también podrá solicitar carril en
barras de dieciocho metros.
También
se incluyen en el contrato las soldaduras eléctricas para formar las barras
largas de 270 metros, que se realizarán en la planta fija de soldadura, su
transporte hasta la base de acopio o la traza y la descarga de estas barras en
las bases de acopio establecidas.
El
visto bueno a la licitación de los carriles se suma a los contratos por importe
de 324 millones de euros que aprobó también el viernes el Consejo de
Administración de Adif Alta Velocidad. En conjunto, se trata de la mayor
licitación aprobada de una sola vez por el Gobierno de España en la alta
velocidad extremeña desde que se iniciara la actuación, en junio de 2007.
Estas
inyecciones económicas para la alta velocidad de Extremadura se suman a las
aprobadas por el Ministerio de Fomento en los últimos meses.
