El Jueves día uno de mayo, ha sido un día grande en Tornavacas, un día que será difícil de olvidar para los Tornavaqueños. Un año más, cuando la noche tomo el pueblo se recreo la leyenda que le da “YA TORNAN LAS VACAS”. Y por la mañana en un sencillo acto se inauguró el monolito tallado en piedra en conmemoración a este hecho.
Por cuarto año, el pueblo y las gentes de los alrededores se echaron a la calle, guiados por el Grupo de Montaña y Senderismo de Tornavacas, recorriendo todo el pueblo con las luces apagadas, con la única iluminación de antorchas y velas, recreando dicha leyenda en diferentes lugares emblemáticos del pueblo.
La leyenda dice: que en en el siglo X, el Rey Leonés Ramiro II batallando con tropas Sarracenas acaudilladas por Ahmad Ben Yala, llega al Puerto de Tornavacas con la intención de conquistar el Valle del Jerte, encuentra una fuerte oposición. Los Tornavaqueños idearon una estratagema consistente en atar unas teas encendidas a los cuernos de sus vacas, y por la noche azuzarlas hacia el campamento enemigo, dando al mismo tiempo grandes gritos y haciendo mucho ruido, para hacer creer a los árabes que era un ataque de una numerosa tropa cristiana. La idea tuvo éxito y el ejército Sarraceno salió en estampida. Al alba los animales guiados por su instinto volvieron su lugar de pastoreo y los lugareños pronunciaron la frase de “YA TORNAN LAS VACAS”
Esta recreación esta participada y ha sido apoyada por todo el pueblo y por todos sus colectivos. Son más de 30 actores y actrices lugareños los que guiados por Germán Mira de Cabo recrean un año más apasionada leyenda.
Por la mañana a la una, se inauguró un robusto monolito de piedra con una inscripción latina tallada, que hace referencia directa a la batalla que, según tradición constante desde hace varios siglos, da nombre a nuestro pueblo y que fue la que por la noche, por cuarto año consecutivo, la que se representó.
El monolito ha sido instalado en la “cimará” del pueblo, teniendo al pie la Fuente de los Mártires, este lugar tiene un significado muy simbólico, ya que de aquí parte el camino hacia Castilla.
«Iluminatio mea terruit turbas maurorum sarracenorum que fugere fecit”.
«la luz aterrorizó a las turbas sarracenas y les hizo huir».
Estos hechos del pasado han llegado a nuestros días no solo por transmisión oral, sino que también hay hechos del pasado que otorgan una justificación documental a la leyenda. La inscripción mencionada fue dada a conocer por un por un párroco Tornavaqueño a finales del siglo XVIII (década de 1780), al geógrafo don Tomás López, quien trabajaba al servicio de la Monarquía de Carlos III. El párroco señalaba que dicha inscripción estaba tallada en una gran piedra, a modo de monumento, que él mismo había visto y que estaba colocada en la raya del Puerto, sirviendo de límite con Castilla. Relatando también que en el escudo de la villa aparecía una vaca con teas encendidas en las astas. De hecho en el primer sello de caucho que utilizó el Ayuntamiento tornavaqueño en la década de 1870 aparece una vaca con unas teas en sus cuernos.
Todo esto tendrá como colofón la celebración hoy día 2 de mayo por la noche de la tradicional Fiesta del Fuego, (hogueras gigantes por toda la villa de Tornavacas) con ofrendas de dulces y ponche para los visitantes, y al día siguiente Romería en el monte de la Cruz, misa, comida colectiva y juegos tradicionales…