La I Feria Internacional de Artesanía en Extremadura FERinARTE, que se desarrolla en Trujillo, continúa recibiendo visitantes de dentro y fuera de la región, así como con los talleres impartidos por los propios artesanos.
Además
de los puntos de exposición y venta de los más de 50 artesanos de España y
Portugal presentes en esta primera edición, otro de los grandes atractivos del
certamen están siendo los talleres organizados e impartidos por los propios
maestros artesanos.
Hasta
el momento se han realizado un total de 10 talleres, aunque aún están previstos
otros seis más, hasta el domingo.
Se
trata de talleres puestos en marcha en dos espacios distintos y de forma
simultánea, por los propios artesanos expositores presentes en la feria.
Algunos
de los que ya se han desarrollado son de joyería, muñecos, marquetería, vidrio,
fabricación de calzado, cerámica, alfarería, forja y muebles de hierro. Para el
resto de la jornada hay previstos talleres de troquelado en cuero, encaje de
bolillos, tinajas, cristal y alfarería.
En
ellos el visitante puede comprobar de forma directa y cercana cuál es el origen
el oficio artesano y la elaboración de los artículos y productos que puede
adquirir en los stands de FERinARTE.
Los
artesanos los han valorado de una forma muy positiva, puesto que sirven para
dar a conocer los oficios y sobre todo el valor que tienen los artículos que
vemos en los puestos, así como el trabajo que hay detrás de cada pieza,
llegando a respetar mucho más el oficio.
También
han querido recordar que el precio de venta asignado a cada artículo está en
relación con el material utilizado y el tiempo empleado en su elaboración. De
ahí que, una vez que el visitante comprueba cómo se hace un anillo, un jarrón,
una mesa de forja, una vidriera, un muñeco o un zapato, lo valoren mucho más.
Durante
el desarrollo de estos talleres, los artesanos responden a las preguntas o
dudas de los asistentes, e incluso en muchos de los casos, están abiertos a la
participación de los visitantes en los procesos de elaboración manual de las
piezas.
Por
otro lado, el hecho de que sean los propios artesanos quienes estén detrás de
cada puesto de venta está siendo muy valorado por los visitantes, ya que les
pueden explicar los procesos, técnicas y materiales de los objetos. La mayoría
considera que este hecho es muy enriquecedor para ambas partes.