Hoy no quiero parecer, ni erudito,
ni vanidoso, ni creído por las cosas que pretendo comentar aquí; pero a fuerza
de ser sincero, hay cosas en nuestra ciudad, que nos las creemos a pies
juntillas, porque nos las dicen y además de todo eso, porque tampoco
investigamos directamente en
determinados asuntos de nuestra ciudad de Mérida, y me explico:
Según parece por los estudios de la investigadora arqueóloga
Dª Alicia María Canto en veinte (20)
argumentos, defiende que el municipio de Mérida existía antes de lo que los
libros dicen, sobre la Fundación
de Augusta Emérita
en el año 25 (a.C.) por el emperador romano Octavio
Avgvsto para acoger a los soldados jubilados eméritos de la legiones V (Alaudae)
y X (Gémina).
Alicia María Canto, sostiene que esta
tesis, hasta la fecha aceptada como irrefutable, se debe a una mala traducción
de un texto de Dión Casio y no la construyó Octavio Augusto, sino Julio Cesar…, según una placa marmórea aparecida, donde se lee “Colonia
Iulia Augusta Emérita”,
pero el historiador y geógrafo griego ESTRABÓN,
en su geografía III, 2, 15, cita expresamente a Mérida entre las ciudades «sinoicísticas»,
esto es, de población mixta indígena y romana. Sus ciudadanos romanos fueron adscritos a la tribu “Papiria”, que eran los nativos de esta tierra.
El Puente romano, no era al principio como es ahora,
estaba dividido en dos partes. El puente se levantó al
mismo tiempo que se fundaba la ciudad, en las últimas décadas del siglo I a. C.
De la obra primigenia se conservan las
arquerías del principio y el final del puente, pues el resto de su extensión ha
sido reconstruida en varias ocasiones por culpa de los destrozos efectuados por
los conflictos bélicos y las grandes crecidas del río. La primera intervención de la que se tiene noticia se realizó en época
visigoda (entre los siglos V y VIII d.C.). Su estado actual quedó fijado por una restauración practicada en
el siglo XIX.
El puente romano original tenía dos tramos de arquerías
separadas que se unían con un enorme tajamar
que se extendía aguas arriba para frenar la fuerza de la corriente. Este tajamar resultó destruido por
una gran riada y fue sustituido en el siglo XVII por cinco nuevos arcos que
dotaron de unidad a todo el puente. Sobre
los restos de este tajamar se construyó una rampa de descenso que todavía hoy
está en uso. En ese mismo siglo se
creó un segundo descendedero, llamado de San Antonio por la capilla dedicada a
ese santo que existe a su salida. En
esta importante reconstrucción de la edad moderna se emplearon sillares
extraídos del teatro romano de la ciudad.
El Templo de Diana, no se construyó para dignificar a
la diosa Diana. Este edificio perteneciente al foro
municipal de la ciudad. Es uno de
los pocos de carácter religioso que se conserva en un estado satisfactorio. A pesar de su nombre, erróneamente
asignado en su descubrimiento, el edificio estaba dedicado al culto imperial. Su construcción data de finales del
siglo I a.C., o principios del siglo
I d.C., en la época augústea.
Esta edificación se ha conocido por los habitantes de Mérida como Templo
de Diana. No obstante todo lleva a
pensar que el templo estuvo dedicado al culto imperial, y como tal, es posible
que reuniera la imagen del emperador así como la del senado divinizado,
haciéndose extensivo este culto a la diosa Roma. La situación de estos templos de culto oficial en el área del
foro y en un lugar elevado, como ocurre en Mérida, corroboran la finalidad del mismo.
Se piensa que fue construido a lo largo del siglo I desde
la etapa de Augusto y más concretamente durante
el gobierno de Tiberio, entre el 14 y el 37 de
nuestra era.
El Arco de Trajano, no lo construyó Trajano, ni fue
dedicado a él…, porque el hallazgo de los restos de un templo basilical en la
actual C/Holguín que hubiera formado parte del recinto del Foro, era idéntico
al Templo de la Concordia del Foro romano
de Roma,
y ese fue construido por TIBERIO.
Y a mediados del siglo I d.C. se inician las obras
de marmorización del Foro Provincial en época del emperador
CLAUDIO,
aprovechando el período de crecimiento económico en toda la Hispania
Romana. ¡Luego fue
Tiberio, o fue Claudio; nunca Trajano!.
El Pantano de
Cornalvo, tampoco se escribe con “V”, sino con “B”. El
nombre de Cornalvo viene de la época de los romanos que llamaban al embalse que
hay dentro del Parque “Cornus Albus” (cuerno blanco) por su forma de cuerno y por
el color blanco de sus aguas. ¡Luego
el nombre de Cornalvo con “V”, tampoco es verdad.
Y la ciudad de Mérida, no es la
Capital Autónoma de Extremadura, según nos tratan y nos tienen dado a entender,
ya que no se le respetan ni sus atribuciones,
ni sus leyes, ni sus derechos para ser la Capital, y entre muchos de los reveses, infortunios,
contradicciones y adversidades que padecemos, entre otras podríamos citar
que:
Ø El Delegado del
Gobierno reside en Badajoz cuando debe
residir aquí por Ley
17/83, de 16 de Noviembre, en su
Artículo 4 y la Ley 6/97, de 14 de Abril, en su Artículo 22.3.
Ø El Presidente de
la Junta de Extremadura, exactamente igual,
pero sobre todo teniendo como tiene su residencia oficial en el Paseo de
Fernández López, ocasionando con ello,
gastos innecesarios por
sus continuos desplazamientos.
Ø La 3ª Zona de la
Guardia Civil, tampoco está ubicada en Mérida, como dice el Real Decreto 367/97, de
14 de Marzo, en su Artº. 2. (B.O.E. del 15-03-1.997, en su página 632). En su Disposición
Transitoria Primera, se concede el plazo de UN AÑO para adaptar el despliegue
de la Guardia Civil a lo establecido en ese Decreto (Plazo que finalizó en el
año 1.998).
Ø El Sr. Arzobispo de la provincia
eclesiástica tampoco reside en Mérida, que es la cabecera de la Sede
Metropolitana Emeritensis y lo hace en
Badajoz.
Ø El Archivo
Eclesiástico de la Sede Metropolitana, ha sido expoliado hasta la ciudad de
Badajoz, sin conocimiento oficial por parte de nadie.
Ø Mérida es la
única Capital Autonómica de España que no disfruta de un Estatuto de
Capitalidad, que es de obligado cumplimiento.
Ø La Delegación de
Tráfico brilla por su ausencia, después de tenerla aceptada y aprobada.
Ø El Museo Visigodo
espera la construcción de su nuevo emplazamiento, aún con un presupuesto aceptado después de 14 años y publicado en el
B.O.E.
Ø La ampliación del Museo Nac. de Arte Romano, espera su turno exactamente
igual.
Ø La estación del
AVE se la pretenden llevar a Esparragalejo, después de estar aprobada aquí su construcción y publicado en el B.O.E. desde el día 05-01-2012.
Ø Al Cine María Luisa le requisaron 3.400.000.– €. del presupuesto para su construcción.
Ø El Centro de
Salud Norte lleva de atraso más de dos años, después de haber sido expoliado.
Ø El Mercado de
Mayoristas está abandonado y arrasado
por los maleantes.
Ø El Convento de
Las Freylas de Santiago, pasó a ser propiedad municipal y espera su
remodelación desde el 2011.
Ø El Mercado de
Calatrava continúa paralizado desde el 2.011 con un presupuesto aprobado de 5.600.000,- €. sin terminar.
Ø El Conservatorio
de Música debe financiarlo nuestro Ayuntamiento, cuando en realidad es una
obligación del Gobierno de Extremadura.
Ø El Archivo
Regional, lo llevamos esperando desde el año 2.009 y las obras continúan
paralizadas.
Y según parece por declaraciones improcedentes de algún político
municipal pacense; Mérida ya no es una ciudad de turismo (aquí ya no viene
nadie); ahora los turistas se van a ELVAS (Portugal) que también es Patrimonio
de la Humanidad por la UNESCO y ya de paso visitan la ciudad de Badajoz, que sin
ser Patrimonio de la Humanidad, al parecer tiene mucho que enseñar…, realizando visitas guiadas y hasta
nocturnas por el Fuerte de San Cristóbal, Puerta Palmas, Puerta Trinidad, Alcazaba árabe y
la Plaza Alta…,
etc.
Así
es que, con este compendio de mentiras, quimeras, invenciones y
artificios, ¿quién puede hacernos caso, por mucho que nosotros pretendamos vanagloriar
lo nuestro?. Aquí lo que de verdad nos está haciendo mucha
falta (porque de lo demás nos sobra), es que los políticos emeritenses de uno y
otro signo, sean conscientes, capaces, valientes y responsables a la hora de defender
con ahínco lo nuestro que por derecho nos corresponde.