Dicen que están dispuestos a luchar por lo que les parece justo y lógico. Por su dignidiad y su trabajo. Porque se les pague lo que les corresponde después de haber cosechado y recogido el fruto, en este caso, la aceituna manzanilla cacereña. Son miles los afectados. de ellos, una buena parte se ha manifestado entre Torrecilla de los Angeles y Pozuelo de zarzón para llegar más tarde a Villanueva de la Sierra donde se han concentrado y leído un manifiesto reivindicativo.
La Guardia Civil ha indicado al respecto que no ha habido incidentes.
Marisa Chamorro, representante de la cooperativa San Marcos, de Torrecilla de los Ángeles, ha sido la encargada de leer un manifiesto en el que los agricultores aseguran que están cansados de la bajada de precios que vienen soportando en los últimos tiempos.
«Con esta huelga y con esta manifestación no mendigamos nada, simplemente le damos el valor que merece el trabajo, el tesón y la calidad de la aceituna que producidos. No mendigamos, exigimos que se paguen precios justos», se indica por parte de los olivareros que por otra parte valoran los compromisos adquiridos con el sector por parte de la Consejería de Agricultura extremeña y que se centran en perseguir los puestos de venta ilegales, procurar ayudas a los agricultores y promocionar la aceituna manzanilla cacereña.
Los olivareros quieren hablar con el rpesidente Monago, «para que escuche los problemas y peticiones que tienen que hacerle los agricultores, los que a diario se enfrentan con la dura tarea del trabajo en el campo».
Ssi quieren las aceitunas, tienen que comprometerse a pagar su justo precio, porque no se trata, de imponer precios para impedir la competencia, sino de señalar precios por debajo de los cuales no se debe soltar ni un kilo de aceituna porque es ir hacia la ruina de los olivares».
En DEx se ofrece el manifiesto ínteghro de los olivareros del norte cacereño:
MANIFIESTO
Hoy el norte de la provincia de Cáceres está demostrando a la opinión pùblica que el sector olivarero, productor de la Aceituna manzanilla cacereña, está más vivo que nunca, más unido que nunca, y está dispuesto a luchar todos a una en defensa de sus intereses.
Que se entere todo el mundo. Los agricultores del norte, los olivareros están cansados de que se les tome el pelo, de que sean, precisamente, quienes labran la tierra, siembran los olivos, crean los olivares, quienes los cuidan, quienes los mantienen utilizando el esfuerzo de sus manos, quienes trabajan y ponen en riesgo sus pertenencias, los que pagan el pato y perciben las migajas del rendimiento económico del producto de los árboles, de las aceitunas.
El esfuerzo que, una vez más, habéis hecho en este día de marcha y manifestación, de acompañaros los unos a los otros, bajo condiciones climatológicas adversas, no puede ni debe quedar sin recompensa. Este esfuerzo, tiene que suponer un estímulo, un apoyo explícito, una manifestación de fuerza para que quienes forman la MESA de negociación y representación de los agricultores estén cargados de argumentos y de razones para conseguir que los compradores de las aceitunas, estén dispuestos a pagar unos precios justos, unos precios mínimos, en función de las campañas, pero que en todo caso, sean precios que cubran el coste de la producción y de la recogida de aceitunas, porque de ello depende que se sigan trabajando los olivares y que sigan aportando ingresos para las familias que los trabajan y que viven en el medio rural.
Con esta huelga, con esta manifestación, NO ESTAMOS MENDIGANDO NADA, simplemente estamos dándole el valor que merece el trabajo, el tesón y la calidad de la aceituna que producimos. No estamos mendigando, estamos exigiendo que se paguen precios justos. Estamos exigiendo que los agricultores están primero que los especuladores, porque si no hubiera agricultores, no habría compradores, asentadores, mediadores, especuladores, si no hubiera agricultores, no hay ganancias para nadie. El valor de la aceituna, la ganancia, hay que repartirla y los agricultores sólo quieren percibir su parte, ni más ni menos.
Hoy le estamos diciendo a quienes abusan, a quienes no arriesgan nada, que se acabó recoger aceitunas sin precio cierto. Eso sólo pueden hacerlo las cooperativas, porque las cooperativas trabajan mancomunadamente por sus socios. Los representantes de las cooperativas son elegidos por los socios, por los agricultores; responden ante las asambleas generales, están obligados a dar cuentas y se deben a los socios. Y los socios deben confiar en ellos, en que harán siempre lo posible para que todos los miembros puedan vender su producto y percibir el mayor rendimiento posible del mismo.
La unión cooperativa es la mejor opción para todos, porque garantiza recoger y colocar en el mercado el producto de todos al mejor precio. Invertir en cooperativas es invertir en economía social, en la economía común, en la de todos. Estar en cooperativa es estar acompañado. La unión cooperativa es la fuerza del campo, del sector agrícola.
A pesar de los inconvenientes, de las dificultadas, de los costes, la apuesta por el cooperativismo es una apuesta segura. La unión de pocos es mejor que nada, pero la unión de muchos es un brazo capaz de ganar todos los pulsos de negocio.
Nadie que esté en una cooperativa puede ser obligado por un comprador sin escrúpulos a vender a un precio injusto, o un precio con pérdidas, porque de no hacerlo puede quedarse con la producción en las cajas. Las cooperativas siempre van a amparar al socio. Entre más sea la capacidad de la cooperativa, más importante será en las transacciones y mayor beneficio tendrán todos los socios.
Hay por tanto que aprovechar este momento, para reivindicar el papel de las cooperativas. Hay que aprovechar para decir que cada cantidad de producto que no se aporta y que se saca de las cooperativas para venderlo por libre es un doble perjuicio, porque se debilita la posición de la cooperativa y se refuerza la posición de los compradores que compiten con las cooperativas que pueden manejar los precios a su antojo.
Hoy estamos aquí, cooperativas, cooperativistas y productores no integrados en cooperativas. Si estamos aquí es porque hay un problema que hemos generado entre todos: la devaluación de la fuerza y la devaluación del producto.
El cooperativismo es hoy por hoy, la única arma que tiene el campo extremeño para defender sus productos y combatir a los especuladores que vienen a esquilmarnos. La unidad es la mejor arma para defender nuestros productos.
Este movimiento, que hemos iniciado, y que comenzó el pasado sábado con la declaración de una HUELGA en la recogida de aceitunas, un PARÓN en el INICIO DE LA CAMPAÑA, ha dado sus primeros frutos.
Ayer mismo, una delegación de la MESA constituida se reunió con el CONSEJERO DE AGRICULTURA DE LA JUNTA DE Extremadura. El Consejero ha actuado con rapidez, porque ha oído el revuelo formado, ha escuchado la voz de los agricultores y ha llamado porque ha habido protestas.
Se ha comprometido, obligado por las circunstancias, a perseguir a los puestos ilegales, a promocionar a la Aceituna Manzanilla cacereña, y a procurar ayudas a los agricultores. Pero hay que decirle al Sr. Consejero, que tiene que cumplir sus compromisos, porque todos los años se ha pedido a la administración que velen porque los puestos sean legales, y ningún año han hecho nada. Vamos a ver cuantos puestos ilegales se cierran este año.
Vamos a ver de qué forma y en qué tiempo el Consejero pone en marcha programas de promoción de la aceituna que se produce en Extremadura.
Y vamos a esperar a ver cómo se formalizan las prometidas ayudas al sector. Que no se crea el Sr. Consejero que con cuatro muletazos va a satisfacer las peticiones que se le han hecho llegar. Vamos a vigilar lo que hacen. Todos los que estamos aquí estamos obligados a poner en conocimiento de la mesa, si se encuentran con abusos, o con fraudes o si se topan con quienes quieren lucrarse a nuestra costa para para que quien se ha comprometido los ponga en su sitio.
Que no se crea el Sr. Consejero que con una entrevista en Mérida ha satisfecho las reivindicaciones de los agricultores. Los Agricultores aquí presentes, exigen la presencia del PRESIDENTE DE LA JUNTA DE Extremadura, DEL PRESIDENTE MONAGO en la zona para oir los problemas y escuchar las peticiones que tienen que hacerle los agricultores, los que a diario se patean los coces de los olivos, los que se enfrentan con la dura tarea del trabajo en el Campo. El norte necesita ayudas, el campo necesita estímulo y el olivar necesita promoción, estimulo, ayuda y lo que es más importante darle el valor y la calidad que con tanto esmero el gobierno realiza con otros productos de denominación de origen.
Por qué algunas denominaciones marchan, y otras caen en picado? De quién es la culpa? Exigimos una denominación de origen de la Aceituna Manzanilla cacereña, y del aceite del norte, que tenga garantía y estabilidad que ayude a que los precios se estabilicen y a conseguir la mayor rentabilidad posible bien de la aceituna de mesa, bien del aceite virgen de excelente calidad que producimos. El gobierno tiene mucho por hacer en materia de denominaciones de origen, y en nuestro caso, estamos en el más absoluto abandono, permitiendo todo tipo de abusos sin poner ningún interés en la solución de los problemas. Esperemos equivocarnos, con el análisis, pero mucho nos tememos que habrá que seguir reivindicando, movilizándose para tener la suficiente repercusión como para que se decidan a hacernos caso.
Esta misma tarde, está prevista una reunión de la MESA con los principales compradores de la zona, con esos que todos conocéis, esos que son los que le sacan el beneficio a nuestro trabajo. A ellos les decimos que si quieren las aceitunas, tienen que comprometerse a pagar su justo precio.. No se trata de imponer precios para impedir la competencia, sino de señala precios por debajo del cual no se debe soltar ni un kilo de aceituna porque es ir hacia la ruina de los olivares.
Si no están dispuestos a garantizar el precio justo, es preferible que se entreguen las aceitunas en las cooperativas, se muelan, o se queden en los olivares. Si no compran aceitunas no pueden venderlas y no pueden ganar dinero a costa de los cultivadores. ES así de simple.
Dame de ganar para que tú ganes. Hay que decirle. Porque si yo no gano o si yo pierdo tu tampoco vas a ganar porque de lo mío no se ríe nadie.
Si todos os mantenéis unidos, si no se llega a un acuerdo, si se mantiene el objetivo de la huelga, vais a vencer, aunque la victoria no sea inmediata al final llegará.
Hemos llegado hasta aquí, no ha sido fácil, VAMOS A PARAR AHORA? Si o no? ESTÁIS DISPUESTOS A GANAR? ESTÁIS DISPUESTOS A AGUANTAR EL PULSO? PUES ÁNIMO Y HASTA EL FINAL.