El Documento del Mes de Febrero del Palacio de la Isla recoge los presupuestos para la adquisición de bancos para el Paseo de Cánovas del año 1895. Los documentos contemplan presupuestos y catálogos que diferentes empresas enviaron al ayuntamiento cacereño para publicitar los diferentes tipos de bancos, tanto en hierro como en madera, que se habrían de adquirir para embellecer el nuevo paseo.
Los catálogos contienen una serie de datos como medidas, color o precios que debían ser estudiados por el consistorio local.
También es de destacar la imagen gráfica de diseños y formas que imperaban en su tiempo, dentro de la estética relativa a parques y paseos de toda España.
Las empresas dedicadas a este tipo de mobiliario urbano eran de lugares como Santander a Sevilla o Barcelona, desde donde se expedían los bancos a cualquier cliente del estado.
Algunos de estos diseños permanecen vigentes en la memoria de muchas generaciones de cacereños que utilizaron los bancos de Cánovas como lugar de reposo en sus paseos por este céntrico enclave del ocio local.
El Paseo de las Afueras de San Antón se inauguró en 1895 y cambió de nombre a partir de 1897, tras el asesinato del entonces presidente del gobierno Antonio Cánovas del Castillo.
El parque de Cánovas se concibió como un lugar para el desarrollo urbano y también para recreo de los vecinos, que podían disfrutar de un moderno espacio donde se instalaron desde plantas y árboles, hasta un kiosco para refrescos y actuaciones musicales o bancos para poder sentarse.