José María Vergeles (PSOE) denuncia el estado lamentable de las urgencias hospitalarias

El portavoz de Sanidad del PSOE, José María Vergeles ha denunciado que en las tres últimas semanas había determinados hospitales con 20 ó 30 camas en los pasillo, por lo que la situación es lamentable y alarmante.

El retraso en las consultas, la sobrecarga en el trabajo de urgencias ha sido la tónica general en todos los hospitales, según Vergeles, aunque «ha sido más visible» en algunos hospitales extremeños.

Frente a esta situación, el Gobierno de Monago responde de forma «tardía» para adoptar medidas coyunturales «dilapidando» el presupuesto sin mejorar la situación.

Una situación más visible en Badajoz, Cáceres y Plasencia; pero también en Tierra de Barros, Llerena-Zafra o Don Benito.

Frente a esta situación las medidas adoptadas han sido abrir alas o plantas que estaban inutilizadas, destacó el portavoz, sin contar con el «personal» necesario y sólo reforzando de forma «puntual» y pagado con horas extras.

Una situación que ha sido debida a la reducción en la plantilla durante todo el 2014, destaca Vergeles, donde los profesionales no han contado con sus días libres en Navidades, se ha eliminado un  contrato de urgencias en Coria y no se cubren las bajas. Denunció también que se han cerrado 21 urgencias rurales y que las listas de esperas «kilométricas» hacen que muchos pacientes tengan que acudir a las urgencias hospitalarias como último recurso.

Así señaló que desde el PSOE a partir de mayo de 2015 se restituirá  los recortes de Monago, se reabrirán las urgencias rurales, y se aumentará el presupuesto para las Consultas de Atención Primaria, o se eliminará el copago.  Todo ello a través de un Plan de Calidad que será la «guía de actuación».

AUTORIDAD SANITARIA

Por otro lado, José María Vergeles, destacó que van a apoyar cualquier medida que proteger a los profesionales, pero afirma que la ley de autoridad sanitaria propuesta por el Grupo Popular, «es hipócrita y no aporta nada nuevo». Además judicializará la relación entre el profesional y el paciente, hasta ahora basada en la confianza.

Así el PSOE apoyará las medidas necesarias pero exige al PP una ley de protección que elimine el blindaje de los altos directivos (los cuales estarán protegidos por ser profesionales), sin ningún anexo complementario y que sea una estrategia consensuada con los Colegios Profesionales