La nueva línea 8 de autobuses urbanos de Cáceres, que atraviesa la ciudad de norte a sur tras la fusión de dos líneas (la 8 y la 10), ha entrado este miércoles en funcionamiento, de manera que el nuevo trayecto unirá el barrio de Cáceres El Viejo con Río Tinto, en el recorrido más largo de todo el servicio municipal de buses.
La medida ha surgido tras la demanda de los usuarios de estas líneas que obligaba a hacer trasbordos frecuentes debido a que la línea 10, que antes unía Cáceres el Viejo con la avenida de Hernán Cortés, no llegaba a los lugares más demandados como el Hospital San Pedro de Alcántara o los juzgados, por lo que la fusión de estas dos líneas permitirá que los viajeros de la zona norte puedan llegar a estos destinos, situados en la parte sur de la ciudad.
Las frecuencias de paso de los vehículos se mantienen cada 20 minutos para los días laborables y cada 40 minutos los sábados, domingos y festivos, pero el último viaje desde las cabeceras de salida, tanto desde Cáceres El Viejo como desde el barrio de Río Tinto se adelanta a las 22.20 horas.
El cambio ha motivado también algunas modificaciones en las paradas, de manera que desde este miércoles, las paradas del final de la Línea 8 en la avenida de Hernán Cortés, y la de la línea 10, en la avenida Virgen de la Montaña, se suprimen y se unifican en la avenida Primo de Rivera, uno de los nudos principales del servicio por donde pasan casi todas las líneas de autobuses, y así no hay necesidad de hacer trasbordo.
La alcaldesa de la ciudad, Elena Nevado, se ha congratulado de esta modificación que se ha realizado escuchando las demandas de los usuarios y ha reconocido que «siempre que sea para mejorar el servicio», las propuestas ciudadanas son bienvenidas.
No obstante, ha recordado que la ciudad va creciendo y que el servicio hay que irlo modificando para adaptarlo a las nuevas necesidades que «no son las mismas que hace quince años».
«Ahora llegamos a todos los barrios y podemos decir que ningún vecino tiene una parada de autobús a más de cuatrocientos metros, lo que no ocurre en todas las ciudades», ha concluido Nevado.