La Junta de Extremadura ha reafirmado su «rechazo» a la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), aunque ha lamentado e «mínimo margen de actuación» que tiene como comunidad, máxime teniendo en cuenta que al llegar el nuevo Ejecutivo, el curso estaba «totalmente matriculado».
La consejera de Educación y Empleo de la Junta de Extremadura, Esther Gutiérrez Morán, se ha pronunciado de esta forma en el pleno de la Asamblea de Extremadura, a raíz de una pregunta del Grupo Parlamentario Podemos sobre qué medidas concretas va a tomar la Junta de Extremadura para «paralizar o minimizar» los efectos de la Lomce en la comunidad.
En la formulación de su pregunta, la diputada de Podemos Irene de Miguel Pérez ha lamentado que desde que accedió al cargo, la consejera de Educación ha dicho «una cosa y todo lo contrario en cuestión de días», ya que al presentarse a las elecciones «dijeron que cambiarían la Lomce este mismo año», y luego «dijo que esta ley no se podía cambiar».
De Miguel ha lamentado que la consejera «ha estado calentando el sillón, porque no ha hecho nada para amortiguar los efectos de esta ley, escudándose en que no tiene competencias», cuando sus homólogos de otras regiones sí lo han hecho.
Por este motivo, la diputada de Podemos ha considerado que «ha sido una clara falta de voluntad política» el que en Extremadura no se hayan tomado medidas.
«MÍNIMO MARGEN DE ACTUACIÓN»
Por su parte, la consejera ha respondido que desde que el PSOE llegó al Gobierno, los responsables de la Consejería de Educación se han reunido con los sectores educativos, con otras comunidad autónomas que rechazan la ley y con el ministro de Educación, todo ello con el objetivo de «intentar paliar» los efectos de la Lomce, «con el mínimo margen de actuación que tenemos».
Esther Gutiérrez ha explicado su «opinión y su trabajo en contra de la Lomce es clara desde el principio», pero ha señalado que el nuevo Ejecutivo regional ya llegó «con el curso totalmente matriculado», cuando otras comunidades «tenían otras posibilidades».
«No hubiéramos sido responsables si hubiéramos decidido derogar un decreto, o simplemente modificar, porque el curso escolar estaba ya modificado y puesto en marcha», por lo que ha señalado la consejera, «no hubiese podido empezar con normalidad».
Así, la consejera ha considerado que «el tiempo en política es uno, y en los centros educativos es otro muy distinto», y ha destacado que la Asamblea «ha cumplido bien su papel urgiendo en el cambio de la política educativa», mientras que por su parte, la administración debe «seguir escrupulosamente los plazos y requisitos jurídicos, aunque no nos guste».
En ese sentido, ha recordado que la Lome «es una ley orgánica y tiene que derogarla otra ley, no Extremadura de forma independiente», y en ese sentido ha aseverado que «ninguna comunidad autónoma está incumpliendo la Lomce, simplemente la han adaptado a sus curriculum y a su normativa dependiendo de las circunstancias de cada comunidad».
