EL HORNO Y LOS BOLLOS

No está el horno para muchos bollos aunque masa hay para dar y tomar. Me refiero a que tal y como está la situación en este país, aún dadas las fechas en las que estamos, el asunto de la gobernabilidad es tan serio que seriamente es como hay que tomarlo. De ahí que aplaudamos que el presidente en funciones Mariano Rajoy se reúna con el líder de la oposición, el socialista Pedro Sánchez, hoy mismo y el lunes 28 con Rivera – C’s- e Iglesias – Podemos-.

Es una primera toma de contacto, de pura estrategia en la que ambos tomarán buena nota y en la que estoy seguro que Rajoy le planteará a Sánchez que dados los resultados electorales, y en función del futuro que nos espera, si es que no hay pactos habrá de nuevo elecciones, y le dirá que o cogemos al toro por los cuernos o no hay corrida que valga, entiéndame ustedes.
 
 
No me creo lo que  dice El País en cuanto a que Rajoy le ofrece presidencia del Congreso y reforma del art 135 de la Constitución. No. Algún bocachanclas se le ha hinchado la boca y ha ido de listo y El País ha hechoo bien en abrir edición con ello. Pero no, de eso nada porque aún es pronto, muy pronto aunque haya prisas, muchas prisas..  Lo siguiente será que haya reuniones Rajoy-Iglesias-Podemos y Rajoy-Rivera-Ciudadanos. Y estas ya mismo antes de que acabe el año presente. Y a partir de ahí, puestas las cartas sobre la mesa de España, que sea lo que sea. Pero que sea y si no de nuevo a las urnas.
 
 
 
En lo que a Extremadura respecta, ha quedado patente que Badajoz vota socialista y Cáceres populares, sobre todo la capital cacereña que es donde ha estado el quid de la victoria de los populares en la provincia. Así las cosas, algunos y algunas sacan pecho y difunden por las redes su éxito cuando de lo que se trata es de gobernar el país y dirigirlo hacia un futuro mejor no a la conveniencia de u unos cuantos. Lo mejor es estar atentos y preocupados, de cómo van transcurriendo los hechos. Y sobre todo, que haya diálogo, mucho diálogo para que se produzca el consenso deseado y si no, ya se sabe, nuevas elecciones.