Ve a tu amo y dile que en César solo manda César, por Antonio Serradilla

El Partido Socialista Obrero Español está en la posición que le ha puesto la fuerza de los votos el pasado 20 de diciembre y un punto en el que las decisiones deben tomarse con frialdad, considerando los intereses de los españoles y de los votantes socialistas, sin perder su posición ideológica y con sentido de Estado. Hasta la fecha cualquier pacto con Podemos ha supuesto un balance negativo con el PSOE, la coalición con ellos sólo hace que darles más votos a los primeros, ha pasado ahora en Valencia y se padece terriblemente en Cataluña. Sólo en las comunidades donde ha habido un distanciamiento claro, en Castilla La Mancha, Andalucía y Extremadura, con posicionamientos serios en la izquierda socialista, Podemos no ha crecido de forma sustancial.

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Podemos aspira a sustituir al PSOE como referente, en toda la izquierda y centro izquierda, votos que sin embargo pueden ir a posiciones más moderadas en ausencia de un Partido Socialista fuerte. La formación morada para eso utiliza las tácticas bolcheviques de 1917 conforme al manual de aquella revolución, no hay más que leer a Kerenski y ver la enorme similitud. Ya se han comido a los mencheviques (IU) y ahora vuelan a suprimir a los Socialdemócratas (PSOE), para luego asaltar el poder, al margen de la Ley invocando el poder popular, e implantar la democracia popular, ellos solos mandado, frente a la democracia representativa occidental. Se han presentado como inmaculados frente a un socialismo caduco y desgastado; se ocultan en presentaciones democráticas y utilizan todos los recursos para destruir al Partido Socialista y al sistema constitucional después. No son demócratas como inteligentemente está demostrando Felipe González. Pretenden tener la verdad absoluta e imponerla a cualquier precio, es por eso que no les ha importando cerrar acuerdos de cualquier forma y manera con cualquier formación independentista en cualquier lugar de España. La afirmación de “dentro de cuatro años repartiremos mochilas” sólo indica su creencia de su verdadera posibilidad de asaltar el poder a cualquier precio.

 

Podemos, sin embargo, empieza a tener erosión, en Madrid en apenas seis meses ha perdido 140.000 votos, en Cádiz la situación del Ayuntamiento es insostenible, no gobernar con ellos como pasa en la capital de España, o dejarlos gobernar en soledad los descubre. También han empezado a acusar problemas, lo de Monedero le costó el puesto, no lo olvidemos, Errejón tiene lo de su trabajo en la Universidad de Málaga, pero sobre todo ha aparecido lo de Irán y esto puede tener consecuencias devastadoras para la formación. Cualquier escenario de poder, les refuerza, no frente al Partido Popular, sino en su intento de tapar todas sus carencias por una parte y en evitar sus escándalos por otra.

 

[Img #48539]Frente a esto la posición es sencilla y tiene su ejemplo en la desesperada resistencia de Cayo Lara y Centella a su integración en Podemos, pero el PSOE lo tiene más sencillo, en clave interna tiene que abordar una profunda regeneración como referencia del centro, del centro izquierda y de la izquierda en un sistema constitucional de pacto y consenso, pero esto significa constituir en lo ideológico una izquierda dinástica, permitan la expresión, de amplio espectro, con un partido abierto y nuevo en su organización, lejos de la endogamia y el autoritarismo actual  superando su concepto como fin en sí mismo. En clave externa puede arrinconar a Podemos en sus métodos estalinistas de organización y dirección, en su falta de compromiso con la democracia representativa occidental y en el desprecio que denotan para quien no piensa como ellos, ejemplo típico del complejo de superioridad moral que les asiste y que extienden a la derecha, a la izquierda y a cuantos se pongan por medio. Unido a lo anterior debe reforzar sus posiciones ideológicas, derechos sociales y cívicos, pero también de verdad, lejos de las leyes que favorecer a los grandes poderes económicos frente a las personas.

 

En esta posición y sin poder Podemos con sus pactos imposibles con los independentistas y las expectativas rotas, sin cuatro grupos parlamentarios en pocos meses podría ser un gallinero. Darle poder a Podemos es darle votos, por tanto, dejarle en la oposición, destacando sus carencias y destacando que sus líderes son verdaderos “hijos de papá” que son de la gente que dicen representar, que no han salido de la universidad y que no conocen el mundo real es desgastarles, que de tiempo a que sus gobiernos municipales se erosionen también. En Cádiz ya están hasta arriba del Kichi. Formar gobierno ahora con ellos es una locura política dado que esa novedad, importantísima, sería tapadera de todo lo demás. Pero si se abunda en una posición clara en los problemas territoriales Podemos se romperá dado que las Mareas, o los de HB en el País Vasco no juegan a un proyecto nacional, si en Cataluña van con la CUP o similares lo mismo, por eso la Colau dice que no, porque las elecciones catalanas pueden ser negativas para Podemos si se juegan bien todas las bazas indicadas. Es por ello que facilitar la formación de estos grupos, o ceder Senadores para otros o incluso ser permisivos para que ERC o DiL forme grupo cuando no cumplen el reglamento a ese respecto es cuando menos irresponsable, las leyes, y el reglamento del Congreso lo es, están para cumplirlas, no para bordearlas. (ERC y DiL, no han llegado al 15% en la Provincia de Barcelona y se exige ese porcentaje mínimo en todas las circunscripciones donde se presenta una formación si no llega a 15 diputados en toda España, condición que tampoco cumple).

 

[Img #48540]Puede estar bien que Pedro Sánchez haga lo que está haciendo, es hacer política en definitiva, pero en un gobierno de coalición sería rehén no solo de Podemos, sino de otras minorías insaciables desde el punto de vista territorial o ideológico que despertarían la actividad de los votantes conservadores, en consecuencia directa del principio acción – reacción, podría dar un resultado similar al muy reciente venezolano, es una referencia clara. Claro está que el apartarse de Podemos es una solución de partido pero no una solución de Estado y para esta no existe una hoja de ruta fácil, dado que es natural la resistencia a coaligar con el Partido Popular, a fin de cuentas llevamos sólo 40 años de democracia representativa occidental y no más de 100 años como ocurre en el resto de Europa, sin embargo puede haber posibilidades:

 

1.- Pactada la mesa del Congreso bajo la presidencia de López, parece que las veleidades de los cuatro grupos de Podemos son historia y debería implantarse la rigurosidad para los demás mandando a todo el que no cumpla el reglamento al grupo mixto, tanto en el Congreso como en el Senado, como hemos dicho. El favor de constituirse como tales no sólo no es agradecido, sino que es interesadamente olvidado al día siguiente. Hacer por tanto favores políticos a cambio de nada no tiene sentido, nunca lo van a agradecer.  Además de esto las Mesas de las Cámaras y el Estado en general deben regular y ordenar la estricta observancia del juramento o promesa de la Constitución que debe hacer imposible la toma de posesión cuando no se cumpla correctamente o se adultera folklóricamente.  

 

[Img #48541]2.- Un pacto PP + Ciudadanos puede gobernar con 163 diputados, Adolfo Suárez gobernó con 165 en 1979, pero necesita 26 abstenciones en la investidura o el pacto con el PNV y Coalición Canaria, lo primero podría ser si Ciudadanos aparca su proyecto de acabar con el concierto, lo segundo más fácil pues ya ha sucedido, así la mayoría de investidura sube a 171 escaños y la abstención necesaria baja a 9 votos. En el caso de no ser posible el voto a favor si podría conseguirse la abstención de estas fuerzas, siendo entonces necesarias sólo las otras 19 restantes.

 

3.- En este escenario el PSOE necesita tiempo para recomponer y recomponerse frente a Podemos desde la oposición, teniendo en cuenta que el ego de Errejón y de Iglesias los puede acabar enfrentando a las primeras dificultades, dado que su protagonismo es enorme y están pagados de sí mismos. Monedero, que es igual que ellos, siquiera ha llegado a las elecciones. Y explicar claramente:

 

La perfecta escenificación de su ruptura con Podemos por motivos territoriales, destacando que Iglesias es prisionero de sus socios independentistas y que es imposible por sus incoherencias; la imposibilidad de pactos con ERC, DiL o BILDU; que los números de Podemos + PSOE son 159 diputados; y que no puede ofrecer una reforma constitucional sin el concurso del PP que tiene mayoría de bloqueo en el Congreso y el Senado del Reino.

 

[Img #48542]Y tras esto exigir, para la abstención de sus 22 diputados andaluces por ejemplo, un nuevo candidato o candidata a la presidencia del PP, lejos de la Gürtel y de Bárcenas, el apoyo expreso a la investidura de Ciudadanos y acuerdos de reforma institucional, Autonómicos en Andalucía, Extremadura o Castilla La Mancha, ¿qué pasaría si estos Presidentes del PSOE mueven ficha  con acuerdos institucionales en sus Comunidades, antes que Pedro Sánchez?, justificación existe dado que Podemos les bloquea la acción legislativa o presupuestaria pidiendo todo sin dar nada a cambio, pagados de su razón;  y otros, con una serie de condicionantes reformistas, a nivel nacional. Así su abstención se entiendo como un ejemplo de sentido de Estado, bien arropado por los socios socialistas europeos, que lo vienen haciendo hace años, desde siempre con buenos resultados electorales, lanzándose a la recuperación del espacio político de la izquierda, posicionando a Podemos en la extrema izquierda. No lo olvidemos, en el PSOE sólo debe mandar el PSOE.

 

Por último, y en qué consistiría ese acuerdo institucional, en una reforma constitucional pactada y con gran consenso en los ámbitos siguiente: social con la fijación de derechos sociales en la constitución; territorial con el cierre del estado autonómico/federal para acabar con los espectáculos tipo MAS y otros que puedan venir; por último la reforma electoral para impedir la sobre dimensión de los pequeños partidos. La primera condición sería del PSOE y desarmaría a Podemos, dado que el PP no tendría más remedio que aceptar planteamientos sociales avanzados, la segunda sería de Ciudadanos, que nació como contrapoder al nacionalismo y la tercera del PP para que gobierne la lista más votada.

 

[Img #48543]En el ámbito electoral y sin ser necesaria la reforma constitucional se asignaría a cada provincia dos diputados, más uno por Ceuta y otro por Melilla, total 102 siendo elegidos los dos candidatos más votados en cada una de ellas y el más votado en las Ciudades Autónomas como ya ocurre. El resto, para un Congreso de 151 diputados, 49 puestos más con un mínimo de un 5% nacional para el acceso, en una lista nacional única, similar a la de las elecciones europeas y en este caso aplicando la vigente ley d’Hont. La reducción de 199 diputados sería todo un ejemplo de contención de gasto público y reducción del aparato propio de los partidos políticos. Un estudio preliminar del reparto de esos 49 diputados es: 21 diputados 29% PP; 15 diputados 22% PSOE; 07 diputados 14% Ciudadanos; 06 diputados 11% Podemos.  

 

Las marcas independentistas de Podemos tienen 2.400.000 votos y la marca nacional 2.800.000, si juegan a tener cuatro grupos, sus votos periféricos no podría computar en la lista nacional y si computan en ella, no podrían tener marcha propia. Se les obligaría a elegir y eso solo significa perder votos, los independentistas no apoyaran un proyecto nacional, su presencia en Podemos es mera estrategia que se complica si se regula el juramento o promesa a la constitución que se ha convertido en un mero trámite sin valor legal o reglamentario hasta ahora. Y el resultado, sumado los diputados territoriales, el siguiente: PP 66; PSOE 49; Podemos 9; Ciudadanos 7; ERC 3; COMPROMIS 3; DiL 2; PNV 2; AHORA EN COMÚN 2; MAREA 2; AHL 2. Un resultado sustancialmente distinto, especialmente para el PSOE. Veremos qué pasa, un político resuelve problemas graves y coyunturales, pero un estadista funda y resuelve el futuro, ahora sabremos a quien tenemos, dado que el arte de la política es sacar provecho de lo posible. Lo imposible es una quimera. No se puede jugar sobre los deseos, sino sobre las realidades.