CCOO de Extremadura señala que la Encuesta de Población Activa demuestra que la región se ha visto gravemente perjudicada por las políticas de empleo impuestas estos últimos años por el Gobierno de Monago, que ha dejado un mercado laboral en una situación muy preocupante.
¡Extremadura es una de las comunidades autónomas con peor comportamiento anual en el conjunto de España, con una caída de la población activa intensa, que es la que explica realmente la bajada del paro, y con un desmoronamiento del número de trabajadores por cuenta propia, lo que evidencia el fracaso de las políticas del emprendimiento del PP.
Además, la región sufre con un contexto laboral para las mujeres muy complicado, ya que del descenso de desempleo en este año sólo se han beneficiado los hombres, y se sigue con niveles elevados de paro de larga duración en todas las edades, algo que debería hacer saltar todas las alarmas.
El crecimiento de un 1,46 por ciento del empleo en el último año es totalmente insuficiente teniendo en cuenta la elevadísima tasa de paro que soporta la región. Y hay que tener muy presente, para ser rigurosos, que la bajada del paro en último año y en el trimestre obedece en gran parte a la destrucción de población activa y por tanto, no están vinculadas en su totalidad a creación de empleo.
La política de fomento del autoempleo del Gobierno de Monago, en la que se invirtieron tantos recursos económicos y que tanto dio para mensajes publicitarios, ha demostrado ser un fiasco absoluto. En 2015, se redujo en casi siete mil el número de personas con trabajo por cuenta propia.
Para CCOO las cifras hoy publicadas vienen a confirmar una situación ya anunciada por el sindicato y revelan la atonía de la economía extremeña. Es necesario un cambio radical en las políticas económicas y de empleo, la aprobación de unos presupuestos regionales lo antes posible como palanca para la reactivación y una mayor solidaridad del Estado en materia de inversión pública
La reforma laboral ha desguazado especialmente el mercado de trabajo extremeño con más desempleo, bajada de salarios, profundización de un modelo de servicios baratos y dependencia de sectores de escaso valor añadido.
Las consecuencias conducen al envejecimiento de la población y a la emigración de las personas jóvenes, todo ello conjugado con el reparto del escaso empleo que se genera a través de la contratación a tiempo parcial.
DATOS
El año 2015 finalizó con 360.000 personas ocupadas, 2.000 menos que en el trimestre anterior. Extremadura, con un descenso del 0,55 por ciento, es una de las Comunidades Autónomas en las que no subió el empleo en el último trimestre del año, al contrario del repunte experimentado en la media nacional del 0,25 por ciento.
Junto a esta reducción del empleo en el último trimestre del año se ha producido una bajada de la actividad de casi seis mil personas en la región que debe servirnos de antecedente para entender mejor la bajada del desempleo.
El paro se sitúa en un total de 140.500 personas, 3.900 menos que en el trimestre anterior. Estas personas no han dejado de estar en paro por haber encontrado un puesto de trabajo sino porque han pasado a situación de inactividad y han dejado de buscar activamente un empleo.
La lectura que hagamos de esta bajada del paro será fundamental para valorar la EPA hoy publicada ya que la situación que vislumbra no es nada halagüeña.
De este modo la tasa de actividad se sitúa en el 54,96%, la más baja desde que comenzara la crisis y somos una de las CC.AA. con la tasa más baja sólo superada por Asturias, Galicia y Castilla y León.
El perfil de la persona que ha perdido su empleo en el último trimestre es el de una mujer de entre 25 y 34 años y con jornada a tiempo completo.
Por sectores, el principal afectado por la destrucción de empleo en el último trimestre del año ha sido la industria con 3.800 ocupados menos, el -9,84 por ciento, seguido de Agricultura con 1.100. El aumento del sector servicios con 2.400 personas ocupadas más no ha sido suficiente para contener la destrucción de la actividad industrial, que en nuestra región está claramente vinculada a la agroindustria.
Los datos de población asalariada, con una caída de 5.900 personas respecto al trimestre anterior, de la cual 5.200 corresponden al sector privado y en su mayor parte temporal, nos demuestran la gran precariedad del empleo creado en trimestres anteriores.
DATOS ANUALES
Respecto al mismo trimestre del año anterior (variación anual) la población ocupada se incrementó en 5.200 personas, un 1,46 por ciento más, la mitad del incremento registrado en la media estatal (2,99 por ciento).
La tasa de incremento interanual observada en Extremadura es una de la más limitadas de todo el país, sólo superando las de Asturias (0,04) y Navarra (0,01) y muy lejos de la de Andalucía que se situó en un 5,13 por ciento.
Por sexos, el aumento del empleo en cómputo anual fue muy desigual ya que para los hombres supuso un incremento de siete mil ocupados más, frente a una caída de 1.800 mujeres. La totalidad de mujeres que dejaron de estar ocupadas coincide con la caída de activas para el mismo periodo y, por tanto, pone de manifiesto que salen directamente del mercado de trabajo y de la búsqueda activa de empleo debido a la difícil situación económica y social.
Según los datos publicados, apenas la mitad de las mujeres (47,6 por ciento) de la región están en situación de actividad, seis puntos menos que el año pasado, mientras que los hombres activos representan el 62,5 por ciento del total de la población masculina en edad de trabajar.
SECTORES
Por sectores, el mayor incremento anual en términos relativos ha sido en la Construcción con un 8,7 por ciento (2.200 personas ocupadas más), al que le sigue la Agricultura con un 2,68 por ciento. En valores absolutos el mayor aumento es para el sector servicios (3.500) y en Industria destruyó 1.600 empleos.
La población asalariada en Extremadura se sitúa en 292.500 personas, lo que representa una subida anual de 12.000 personas respecto al mismo trimestre del año anterior, es decir que el empleo por cuenta propia bajó en el último año en casi 7 mil personas, un 9,15 por ciento. Por sexos, el incremento de mujeres asalariadas fue de un 2,11 por ciento frente al 6 por ciento de los hombres.
Si desagregamos los datos en función del tipo de contrato, la variación interanual de las personas con contrato indefinido fue de 5.900, el 3,16 por ciento. De este total fueron mujeres un total de 4.100.
El empleo temporal se incrementó en el último año en 6 mil personas, representando un aumento del 6,41 por ciento, el doble del registrado en el empleo estable y sube la tasa de temporalidad hasta el 34,1 por ciento, siete décimas más que el año pasado.
Respecto al tipo del sector de la población asalariada en Extremadura, el año 2015 ha tenido un buen comportamiento para el sector público con casi seis mil personas más que el mismo trimestre del año anterior.
La tasa de paro ha bajado del 29,96 por ciento en el cuarto trimestre de 2014 al 28,07 por ciento en el 2015. Sin embargo, aunque es positiva una bajada en la tasa de empleo no hay que perder de vista que la bajada del paro en 11.300 personas en el último año se debe a la importante destrucción de la población activa en 6.200 personas y, por tanto, más de la mitad de la bajada del paro no se debe a un inserción laboral del desempleado sino a que se pasa a situación de inactividad o deja la región.