Cuando el Excelentísimo Señor Presidente de la Junta anunció que las competencias de Cultura quedaban en el ámbito directo de su staff y competencia, se abrió un abanico de esperanza frente a los cuatro años de sequía popular, propiciados por el Doctor Monago Terraza que pensó que esto de la Cultura se hacía, como casi todo lo suyo, a golpe de efecto y talonario.
Los creadores, los investigadores, los generadores de arte y conocimiento son personas que están en el detalle, que buscan la perfección, que tienen ideas.Esto requiere atención y tiempo en las personas que desde la Administración tienen que escuchar y coordinar estas actividades. Es para ello necesario conformar un buen equipo. Atender los proyectos en tiempo, mimarlos, cuidar a los creadores de ciencia, arte y cultura, aprovechar sus conocimientos, oportunidades y contactos. Si se hace bien, puede ser muy provechoso.
Lo que en principio fue un soplo de esperanza, está ahogado desde nuestra óptica en una estructura vertical de toma de decisiones y de gobierno. Quizás una organización limitada en recursos materiales y humanos impide que se atiendan los proyectos y recibir a la gente que con su idea debajo del brazo pide citas que si se sustancian pueden tardar meses en ser una realidad. El artista, el escritor, el investigador, el académico, el profesor, tiene sumo cuidado en agradecer cada gesto, cada correo, cada contacto, cada detalle, pues sabe bien que la relación cultural y científica se construye sobre estos pilares, generando confianzas de colaboración imprescindibles.
¿ No sería más adecuado, Sr. Presidente, tomar la decisión de desligar Cultura de su staff y crear la Consejería correspondiente, con un equipo, proyectos y presupuesto adecuados a los tiempos que vivimos, siglo XXI, para que nuestra región avance en este campo como se merece, al menos por historia y proyección? Estamos seguros que los agentes, gestores, profesionales de la cultura, y no digamos colectivos, creadores, autores y escritores aplaudirían tal decisión. No pasa nada por corregir el error de haberla incluido bajo su paraguas, al fin y al cabo sobre éste estará siempre, de todos modos ¿ o no?
Es el momento de tomar decisiones, sr. Presidente, que permitan poner en marcha un proyecto cultural solvente, con 40 meses de ejecución por delante, en Extremadura, en su universidad, en ámbitos de cultura y ciencia, donde existen editores, escritores, artistas, investigadores, profesionales de la información, que si son apoyados pueden hacer un gran papel, del cual nos beneficiariamos todos, desde Vd y su gobierno hasta el extremeño más humilde.. La cultura está conformada de ideas, las ideas son riesgo, y el riesgo suele mover el mundo. Movamos el mundo, Sr. presidente, desde y con la Cultura en y desde Extremadura.