Esta mañana se han aprobado los Presupuestos de la Comunidad Autónoma de Extremadura. Los necesitaba Extremadura. Agradezco a todos los diputados y diputadas el trabajo intenso de estos meses. Agradezco al Grupo Socialista PSOE-SIEX su apoyo y al Grupo Popular y a Ciudadanos su abstención después de largas semanas de negociaciones.
Creo que los presupuestos se empezaron a aprobar en noviembre, cuando fue rechazado el primer Proyecto. Si a partir de entonces nos hubiéramos dedicado a discutir sobre culpables de que Extremadura no tuviera presupuestos, hoy tampoco los tendría. Asumí en primera persona la responsabilidad. Algo habíamos hecho mal y nos pusimos manos a la obra a construir consensos. Aprendí, en los años vividos en política, que los liderazgos se construyen a partir de la asunción y el reconocimiento de las responsabilidades.
Ahora toca ejecutarlos con celeridad y eficacia. Aquí, en Extremadura, existe un “microclima” de diálogo abierto y sin precios, que no sean otra cosa que la firme voluntad de mejorar y ser útiles a la vida de la gente. Los grupos políticos presentes en la Asamblea de Extremadura van a ser protagonistas de la política extremeña como nunca antes ocurrió, no por mérito de nadie, sino porque fue lo que los ciudadanos nos dijeron el 24 de mayo de 2015.
Hoy hay 150 millones de euros más para la sanidad , un 12%, y un 5% más para la educación. Se han incorporado 82 millones de euros en la negociación para políticas productivas y sociales.
Frente a la política del frentismo hay otra política. La que tiene que ver con la vida de la gente y esa nace en el diálogo.