Su puesta en escena sobre el Teatro Romano de Mérida, donde podrá verse hasta el próximo domingo, y que ha registrado una entrada superior a lo que es habitual un estreno cuando coincide en miércoles, está lograda gracias a 25 toneladas de polvo de cuarzo que hacen las veces de arena de la playa en la que descansa el ejército aqueo.
El cuarto estreno del 62 Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida presenta a un Aquiles atormentado por la guerra que pese a su condición de héroe y verdadero guía para sus soldados es incapaz de encontrar el sentido a la guerra y, en consecuencia, a su vida.
En ‘Aquiles, el hombre’, el héroe de la guerra de Troya deja paso al ser compasivo que habita en su interior, el que se pregunta qué sentido tiene continuar con una guerra que nada arregla, que todo lo destruye.
Toni Cantó es el encargado de dar vida a un Aquiles, el que propone José Pascual como director de la obra, que intensifica hasta el extremo la actuación de un personaje arrollado por el fragor de la interminable batalla.
La intensidad del drama marca el desarrollo de un texto corto, apenas alcanza la hora y veinte minutos de función, que se desarrolla en el campamento del ejército de Agamenón en su sitio a la ciudad de Troya.
La historia comienza transcurridos nueve largos años que han hecho mella en el ejército, desde el primero hasta el último de sus hombres. Y Aquiles, pese a su condición de héroe, no se queda atrás.
«Nadie ha ganado nada. Todos hemos salido perdiendo», llega a señalar el soldado, quien clama contra la «absurda espiral de destrucción» en la que él y los suyos se han metido, y de la que ya apenas alcanza a ver una salida que no sea una muerte a la que persigue de principio a fin, porque para Aquiles, YA «nada tiene sentido».
El elenco está formado por diez actores que dan vida a unos episodios extraídos de la Ilíada dramatizados por Roberto Rivera. Acompañan a Toni Cantó sobre el escenario Ruth Díaz en el papel de Briseida, la viuda troyana raptada por Aquiles; Pepe Ocio como Néstor, Philip Rogers en los papeles de Calcas y Priamo; David Tortosa como Ulises, Rubén Sanz como Ayax y Héctor, Óscar Hernández como Diomedes; Miguel Hermoso como Agamenón y el desconocido, Lourdes Verger como la sacerdotisa y Octavi Pujades como Patroclo.
Tras finalizar la función, los protagonistas han comparecido, como es habitual, ante la prensa. «Hemos vivido una noche maravillosa, mágica», ha expresado un Toni Cantó que ha reconocido que ha tenido «una sensación muy buena» durante la función.
El director de la obra, José Pascual, que se ha mostrado «satisfecho» con el resultado, ha agradecido la entrega de la compañía, y ha explicado que «transmitir la intensidad» con la que se plantea la obra «exige una generosidad por parte de los actores que no es muy habitual», dado que los personajes «todo el tiempo están viviendo una batalla».