Las nuevas Escuelas Profesionales también van a estar más enfocadas hacia el entorno laboral. Por eso, en estos programas, donde se alternará la formación con el trabajo real, se van a poder poner en práctica las competencias adquiridas en empresas, gracias a una formación práctica, que estará permanentemente tutorizada. En este sentido, también se ha mejorado la comunicación con el entorno empresarial para que esta sea más fluida. Para ello, se crearán redes de empresarios y profesionales y se aumentarán las ayudas a las empresas para obtener una mejor colaboración.
Las nuevas Escuelas Profesionales también van a ofrecer la posibilidad de contar con especialidades formativas conducentes a certificados de profesionalidad, impartidas en mejores instalaciones y con mejores equipamientos, puesto que ya se ha exigido la acreditación previa de los mismos. Estos son un aval que abre puertas al mercado laboral.
Por todos estos aspectos, los proyectos de las nuevas Escuelas Profesionales serán más viables, ya que estarán más adaptados a las demandas del mercado laboral de cada territorio en el que se implante este programa.