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AECERIBER pone en duda la pureza racial de la raza porcina ibérica

CAMPO
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La Asociación Española de Criadores de Cerdo Ibérico (Aeceriber), responsable de «garantizar la certificación de la pureza racial» de los ejemplares reproductores, ha colgado en su web un comunicado en el que asegura categóricamente que el hecho de que las hembras se encuentren inscritas en la sección aneja del denominado Libro Genealógico de la raza porcina ibérica —donde teóricamente tienen que estar las ‘patas negras’— «no garantiza en ningún caso una pureza racial al 100%».

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«Las hembras incorporadas al registro auxiliar se consideran exclusivamente como animales de raza, en ningún caso hembras 100% ibéricas o hembras de raza pura, aquellas cuyos padres y abuelos estén inscritos o registrados en el mismo libro genealógico», explica la nota, que asegura que el registro consta de dos secciones.

 

Según la asociación de criadores, el libro se divide en una sección aneja y en otra principal. La primera, añaden, «permite la incorporación de hembras con alguna genealogía desconocida o que no fueron registradas en su momento pero que cumplen el prototipo racial, mientras que la sección principal requiere el conocimiento de la genealogía de dos generaciones de ascendientes como mínimo». Esta última, señalan, «es el núcleo esencial de un libro genealógico». Según declaró la presidenta de Aeceriber, Lucía Maesso Corral, en una entrevista en noviembre de 2014 en la revista ‘Consumidorex’, el registro auxiliar entró en funcionamiento en febrero de 2008.

 

El Ministerio Público rechaza una denuncia de un extrabajador de unos grandes almacenes porque el engaño era solo entre animales de la misma especie, no daban gato por cerdo.

 

El problema, sin embargo, radica en que tanto las inscritas en una sección como las registradas en la otra son posteriormente cruzadas con sementales de la raza norteamericana duroc y la cría obtenida se considera a efectos legales como unejemplar ibérico al 50%. Es decir, que tanto si nace de una madre de raza pura como si proviene de otra sin garantía de pureza racial -sin prueba de ADN-, se le considera también de pura raza ibérica. El asunto tiene más importancia teniendo en cuenta que la mayor parte de las hembras reproductoras están inscritas precisamente en la mencionada sección aneja del Libro Genealógico de la raza ibérica.

 

En concreto, según datos del Ministerio de Agricultura, de las 400.259 hembras inscritas en el registro censal gestionado por Aeceriber a 31 de diciembre de 2015, último dato publicado, 306.852 están incorporadas a la citada sección auxiliar. Dicho de otra manera, que el 77% no son reconocidas como ibéricas puras y, sin embargo, se certifican como si lo fueran y se cruzan con ejemplares de otras razas para alumbrar lechones que se comercializan como jamón 50% o 75% ibérico. La vigente normativa, sin embargo, indica claramente que el término ibérico debe limitarse exclusivamente a «productos procedentes de animales con al menos el 50% de su porcentaje genético correspondiente a la raza ibérica». La legislación comunitaria, por otro lado, obliga a mencionar los ascendientes de todos los reproductores inscritos en los libros genealógicos.

 

El reconocimiento por parte de la asociación de criadores de que no existe garantía de que la mayoría de las madres reproductoras sean 100% ibéricas se une al hecho,revelado por El Confidencial el pasado mayo, de que el protocolo de actuación para la calificación racial, revisado por Agricultura a finales de 2015 y realizado también por Aeceriber, fija la simple revisión visual como el método que por defecto deben utilizar los técnicos —todos designados por Aeceriber— para determinar que un animal es realmente puro.

 

El análisis genético, única forma de determinar científicamente que un cerdo proviene realmente de ascendientes ‘pata negra’, es utilizado solo excepcionalmente. Únicamente cuando el ganadero discrepe de la conclusión emitida por el técnico que manda Aeceriber para calificar a ojo al ejemplar, «podrán tomarse muestras de sangre (…) para su envío a un laboratorio oficial con objeto de realizar un análisis de pureza racial del ADN mediante técnicas de genética molecular», estipula el mencionado protocolo aplicado por Aeceriber y aprobado por el Ministerio. En el resto de casos, la inmensa mayoría, basta con que el experto observe los rasgos físicos del animal y los compare con los que marca el prototipo, que estipula una especie de modelo estándar de cerdo ibérico.

 

LA PREGUNTA DE CIUDADANOS EN EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS

 

A Ciudadanos le siguen sin cuadrar las cuentas en el tema del porcino ibérico. Si ha comenzado la legislatura cuestionando la autenticidad de la pureza de los animales inscritos en el Libro Genealógico del cerdo ibérico, hecho que provocó un monumental enfado de la Asociación Española de Criadores de Cerdo ibérico, Aeceriber, ahora de nuevo su diputado Toni Cantó ha presentado una pregunta parlamentaria al Gobierno para que explique los motivos que han propiciado el vertiginoso incremento de los sacrificios de animales de la variante comercial denominada como cebo de campo ibérico durante los dos últimos años.

 

 

Cantó puntualiza que “desde su habilitación normativa en el año 2007, esta modalidad productiva registraba una media de sacrificios anuales de unos 34.000 animales, pero que tras la reforma consumada por Arias Cañete en enero de 2014, se han contabilizado 843.891 sacrificios, de modo que desglosados fueron 310.449 ejemplares durante el año 2014 y 533.442 a lo largo del 2015”.

 

Ahondando en el problema, cabe destacar que ni el Ministerio de Agricultura, ni mucho menos el Gobierno, han tenido presente los fatídicos daños que esta novedosa concesión productiva ocasionará al medio ambiente, puesto que al incrementar ostensiblemente la densidad ganadera por hectárea, –100 cochinos–, las emisiones liberadas a la atmósfera de gases de efecto invernadero aumentarán de un modo exponencial, razón por la cual concluye Cantó consultando, “¿si ha estudiado el Gobierno las posibles consecuencias medioambientales que podrían darse de estos procesos productivos?”.

 


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