El número 40 es un número utilizado para señalar un tiempo de prueba o examen para poner algo o alguien en ‘evidencia’ ya sea buena o mala. Si se pasa la prueba se muestra durante ese periodo tal evidencia positiva. De igual manera, si no se pasa la prueba, se muestra durante ese periodo la evidencia negativa.
El sentido del número se halla en la base del Antiguo y del Nuevo Testamento, y el cuarenta refiere los días de reflexión y penitencia de la Cuaresma. El azar me ha conducido a este artículo de la Periodista Mónica Arrizabalaga, publicado en Madrid el 12 de febrero de 2016, y me ha llamado la atención, por lo cual, me he adentrado en su lectura, con mi reconocimiento a la autora de esta idea, en espera de contar con su beneplácito por dedicarle este espacio al número 40 que aparece en más de cien ocasiones en la Biblia. La Cuaresma significa 40 días, un número que no fue escogido al azar para este periodo de reflexión, que se abre con el miércoles de ceniza y se prolonga hasta la Semana Santa y también, cuarenta fueron los días que pasó Jesús en el desierto antes de iniciar su vida pública.
«La referencia básica en la Biblia al número cuarenta son los cuarenta años pasados en el desierto por el pueblo de Israel (no solo por Moisés). “Las tentaciones de Jesús aluden a los cuarenta años de éxodo”, explica Santiago Guijarro, catedrático de Nuevo Testamento en la Facultad de teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, que dice que «la referencia básica en la Biblia al número cuarenta son los cuarenta años pasados en el desierto por el pueblo de Israel. Las tentaciones de Jesús aluden a los cuarenta días de éxodo, cuando Dios envió el diluvio, «cuarenta días y cuarenta noches estuvo lloviendo sobre la tierra» Génesis 7,12). «Isaac tenía 40 años cuando se casó con Rebeca» (Génesis 25,20) y también Moisés guió al pueblo de Israel durante 40 años por el desierto hasta la Tierra Prometida y pasó 40 días de oración en el monte Sinaí antes de recibir las Tablas de la Ley (Deuteronomio 9, 9-11).
-Goliat desafió a los israelitas por espacio de 40 días, hasta que fue vencido por David, que reinó durante 40 años (1Re 2,11), el mismo tiempo que su antecesor Saúl y que su hijo Salomón (1Rey 11, 42) -El profeta Elías pasó 40 días en ayunas en el desierto hasta encontrarse con Dios en el monte Horeb (1Re 19,8),-Jonás anunció que Nínive sería destruida a los 40 días s(Jon 3,4) y Jesús fue presentado en el Templo a los 40 días de su nacimiento (Lc 2, 22) tal como mandaba la Ley (Lev 12)
.Cuarenta días pasó Jesús en el desierto y tras su crucifixión, el tiempo en el que se apareció a sus discípulos fue precisamente de 40 días antes de la Transfiguración.
Es probablemente un tiempo en que Dios ejerce su fuerza amenazadora con vistas a la conversión. Este sería el sentido principal de los 40 días del diluvio», según Aldazábal, quien señalaba que «es también el tiempo en que Dios pone a prueba a su pueblo cuando le dice: «Y tienes que acordarte de todo el camino que Jehová tu Dios te hizo andar estos cuarenta años en el desierto, a fin de humillarte, de ponerte a prueba para saber lo que estaba en tu corazón, en cuanto a si guardarías sus mandamientos o no».
