Rómulo Peñalver, 10 de abril de 2’25.- En Cáceres, la poesía de Federico García Lorca ha vuelto a encontrar voz y cuerpo. Esta vez, no en un escenario ni en una tertulia, sino entre las páginas de un facsímil que es, en sí mismo, un acto de memoria, resistencia y arte.
La Diputación Provincial ha inaugurado este miércoles una nueva línea editorial centrada en la Memoria Histórica y Democrática con la presentación del Romancero Gitano ilustrado por Carles Fontseré, una joya editada originalmente en el París ocupado de 1943. Fue un acto celebrado en el salón de actos del edificio Pintores 10, donde convergieron instituciones, investigadores, artistas y ciudadanos en general.
Más que un libro, este facsímil es una declaración. Una edición limitada y numerada de 200 ejemplares que reproduce con fidelidad aquella obra nacida en el exilio, bajo el aliento de un cartelista que supo ver en Lorca algo más que versos: un símbolo de libertad y belleza frente a la barbarie.
“Todavía hay víctimas asesinadas por el franquismo que no se sabe dónde están”, recordó Miguel Ángel Morales, presidente de la Diputación. “Este libro es también para ellas, para seguir recuperando cuerpos… y memoria”.
La edición —fruto de una alianza entre la Diputación de Cáceres, la Universidad de Extremadura, la Asociación Amigos del Flamenco y la Generalitat de Catalunya— reúne doce romances escritos entre 1924 y 1927, acompañados de catorce litografías cedidas por el gobierno catalán. Un diálogo entre palabra e imagen que cruza tiempos, geografías y heridas.
El acto contó con las intervenciones de la vicerrectora de la UEx, María Teresa Terrón; el filólogo José Luis Bernal, autor de uno de los tres ensayos introductorios; el historiador Julián Chaves y la poeta Ada Salas, que emocionó al público con la lectura de algunos de los romances lorquianos.
José Chaves, presidente de la Asociación Amigos del Flamenco, aportó el alma del proyecto: fue su entidad la que rescató el original de Fontseré, esa edición clandestina impresa mientras Europa ardía y la cultura era uno de los pocos refugios del alma.
Fernando Ayala, responsable del Servicio de Memoria Histórica y Democrática, adelantó que este volumen estará presente en la próxima Feria del Libro de Cáceres y podrá solicitarse directamente a la Diputación. “Es un testimonio vivo”, dijo, “y lo iremos reeditando para que la ciudadanía pueda abrazarlo”.
Este facsímil inaugura una colección que continuará con dos títulos cargados de sentido: Don Clodo. Crónica de un rescate, de Elías García Blanco, y Las mujeres de Extremadura durante la contemporaneidad. Obras que rescatan voces y miradas sepultadas por el polvo del olvido.
