Cuando esto sucede llega el momento en el que te tienes que sentar frente a tu ordenador y aprender a cómo hacer un currículum perfecto.
Y es que tendemos a irnos por los cerros de Úbeda, por esos aquí te dejamos unos cuantos consejos para que hagas un currículum en condiciones:
-No puede superar las dos hojas de ninguna de las maneras, de hecho, lo ideal sería que ocupase solo una, pero como sabemos que eso es bastante difícil, sobre todo, si has estado en diferentes empresas, al menos no sobrepases las dos hojas.
-Tiene que se visualmente atractivo y el texto ha de respirar, es decir, deja un interlineado adecuado para que no quede demasiado junto y produzca rechazo solo verlo. Para que quede sugerente a la vista también puedes insertar los logotipos a color de las empresas donde estuviste. Emplear una plantilla con un diseño original también te puede ayudar, y mucho, a que tu currículum sea atractivo a la vista.
-Pon una foto en la que se te vea de manera nítida, no te olvides de sonreir, no a carcajadas, pero esboza al menos una sonrisa para transmitir naturalidad y buenas energías. Cuidado con la vestimenta que empleas, no te pases de informal recuerda que estás buscando trabajo… ¡Y por cierto! Cuidado con el fondo que aparece en tu foto, nada de paisajes, también tiene que transmitir algo relacionado con el aspecto laboral, por ejemplo, en una oficina, en una sala… No hace falta que sea en un despacho, pero desde luego, que no aparezcan de fondo otras personas, puedes utilizar, por ejemplo, un fondo neutro. Si tienes dudas al respecto recurre a un profesional y que te haga alguna foto de estudio, te aseguramos que te resultarán súper útiles.
-Una de las cosas más importantes es el contenido que vas a poner en tu currículum, destaca las tareas más importantes que has realizado, las que te pueden diferenciar del resto, no hables nunca en primera persona, cuenta tus logros, qué has conseguido en esa compañía y cuáles han sido tus responsabilidades allí.
-No te olvides de incluir tus datos personales como edad y dónde vives. Añade también tus estudios, pero sin volverte loco, hay cursos que no interesan a nadie, limítate a los más importantes y, por supuesto, incluye los idiomas que sepas.
Esperamos que estos consejos te hayan resultado útiles, te recomendamos también que no muevas siempre el mismo currículum, sino que lo adaptes de acuerdo a la oferta laboral que te interese, ya sabemos que es un trabajo muy pesado, pero te aseguramos que tu porcentaje de respuesta va a aumentar y si a todo esto le añades una carta de presentación te aseguramos que como mínimo recibirás una llamada por parte de la compañía ¡Mucha suerte!