Cultura DEx, 23 de noviembre de 2025.- El XX Premio Dulce Chacón de Narrativa Española ya tiene dueño definitivo entre aplausos, memoria y emoción contenida. El escritor ubetense David Uclés recogió este sábado en Almendralejo la escultura de El Abrazo, obra de Iñaki Martínez, por su novela La península de las casas vacías, un texto que ha conmovido al jurado profesional y popular y que ya forma parte, por derecho propio, del universo literario de Dulce Chacón.
Literatura, memoria y Extremadura como territorio emocional
Uclés llegó a Almendralejo con la humildad del que sabe que recibe algo más que un premio: un símbolo. En cuanto tomó la palabra, puso la mirada en el cielo y un pie en la historia:
recordó los fusilamientos de la Plaza de Toros de Badajoz, agosto del 36, episodio que —confesó— lo estremeció hasta la médula durante el proceso de escritura. «Empaticé con esta tierra», dijo, antes de recibir una ovación que sonó a abrazo colectivo.
La obra, escrita en clave de neorrealismo mágico, utiliza la Guerra Civil como un espejo roto en el que asoman fantasmas, silencios y una sensibilidad muy cercana a la que defendió Dulce Chacón: la del humanismo que no se resigna.
Instituciones, familia y lectores: un premio que no se detiene
La presidenta de la Diputación de Badajoz, Raquel del Puerto, fue la encargada de entregar la escultura, y aprovechó para lanzar un mensaje que resonó fuerte:
«La literatura debe ser escrita y leída con libertad. Necesitamos textos con rigor, sosiego y calma, lejos de la superficialidad».
También reivindicó la cultura como herramienta de cohesión territorial y la obligación de llevarla a todos los rincones de Extremadura, sin excepciones.
La presencia de la familia Chacón dio a la gala una calidez especial. Inma Chacón subió al escenario acompañada de Eduardo Pisador, uno de los nietos de Dulce, en un auténtico relevo generacional. Afirmaron que «el Dulce sigue y seguirá», y que en este premio se mezclan —como dijo Eduardo— «el azul y el naranja de nuestras abuelas», colores de una memoria que no se apaga.
Un premio con dos miradas: la profesional y la popular
La Diputación recordó la importancia del doble jurado —profesional y popular—, que aporta una riqueza de perspectivas poco habitual en los premios literarios.
Los lectores que forman parte del jurado popular recibieron un reconocimiento explícito: su papel, dijo Del Puerto, es esencial para que el premio siga creciendo sin perder los valores de Dulce Chacón.
¿Regreso a Zafra? La puerta no está cerrada
Aunque el premio se ha consolidado en Almendralejo en los últimos años, la institución provincial reiteró su disposición a devolver el certamen a Zafra cuando el Ayuntamiento y la familia así lo deseen. Mientras tanto, se comprometen a seguir proyectándolo y elevando su prestigio.
Un final con música y memoria
La gala concluyó como debía: con un homenaje a Dulce Chacón, cuyo legado literario sigue siendo brújula y latido de este premio. La música puso el broche a una tarde donde se mezclaron emoción, memoria histórica, literatura y esa Extremadura que sigue sirviendo de refugio e inspiración.
David Uclés ya está, como dijo la propia Inma Chacón, “ligado para siempre” a Dulce.
Para él, La península de las casas vacías deja de ser solo una novela: pasa a ser parte de un mapa emocional que cruza Úbeda, Extremadura y la memoria de una escritora que jamás dejó de buscar la verdad de los silencios.







