Redacción DEx, 27 de diciembre de 2024.- La Guardia Civil, en colaboración con Interpol y la Policía Nacional de Colombia, desarticula una red criminal que defraudó más de 150.000 euros en España mediante estafas en la venta de animales de compañía.
En una operación conjunta con Interpol y la Policía Nacional de Colombia, la Guardia Civil ha desarticulado una red criminal internacional que defraudó más de 150.000 euros a 250 víctimas en España, algunas de ellas en Extremadura, mediante estafas en la venta de animales de compañía. La operación, denominada ‘Canmoney’, ha resultado en 28 detenidos y 30 investigados entre España y Colombia.
Estrategia Criminal
La investigación se inició tras una denuncia por estafa en la compra de una mascota que nunca llegó. Los estafadores ofertaban perros de compañía por unos 500 euros en portales de compraventa. Para ganar la confianza de las víctimas, enviaban documentos de identidad usurpados. Tras el primer pago, exigían un segundo pago bajo amenazas de muerte, utilizando imágenes intimidatorias de armas de fuego para asegurar el pago del transporte.
Desmantelamiento de la Red
El operativo permitió esclarecer 681 hechos delictivos, incluyendo 335 estafas, 158 usurpaciones de estado civil, 95 falsificaciones de documentos, 33 amenazas, 60 casos de blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal. La red criminal logró más de 35 millones de euros en transacciones con criptomonedas y más de tres millones de euros en efectivo en España.
Captura de Implicados
Las primeras investigaciones culminaron con la detención de un implicado en Valencia. La criptomoneda se utilizaba para ocultar los fondos ilícitos y facilitar su integración en el sistema financiero legítimo. Un punto clave fue la implicación del propietario de un locutorio en España, que actuaba como testaferro, ingresando tres millones de euros en efectivo y convirtiéndolos en criptomonedas.
Organización Jerárquica
La estructura de la red incluía personas en España y Colombia que abrían cuentas bancarias para el dinero de las estafas. El dinero se convertía en criptomonedas y se depositaba en direcciones descentralizadas, operadas por miembros en Colombia y Camerún, principales líderes de la organización.
Registro y Confiscación
En los registros realizados en España y Colombia, se confiscaron teléfonos móviles, propiedades, vehículos, ordenadores, dinero en efectivo, billeteras frías de criptomonedas, armas de fuego ilegales y documentación. La operación contó con la colaboración de Europol y otras agencias internacionales.
Las víctimas fueron identificadas en 43 provincias españolas, demostrando el amplio alcance de la operación.