Del mismo modo, se ha incrementado la dotación de camas hospitalarias en 40. Se han ubicado en la quinta planta del hospital de Mérida que, hasta la fecha, estaba destinada a consultas y despachos.
El área del servicio de rehabilitación del hospital se ha dotado del equipamiento necesario para funcionar como unidad de urgencias respiratorias y sala polivalente de ingresados probables de COVID-19 con 34 camas, 10 puestos de sillones, oxigenoterapia para más de 40 puestos y sala de críticos.
Las plazas residenciales para hospitalización también se han aumentado por si fuera necesario su uso. 34 de ellas están disponibles con oxigenoterapia y otras 60 plazas de residencia general.