La 71ª edición incluirá 150 funciones, 10 grandes espectáculos en el Teatro Romano —ocho de ellos estrenos absolutos— y la incorporación de producciones portuguesas y latinoamericanas
Rómulo Peñalver, 17 de junio de 2025.- El Museo del Teatro Romano de Lisboa ha sido el escenario simbólico elegido para presentar este lunes la 71ª edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, que este año consolida su carácter internacional con la inclusión de producciones portuguesas, latinoamericanas y la renovación de acuerdos con festivales de Italia.
El acto, presidido por el director del festival, Jesús Cimarro, contó con la presencia de autoridades como el embajador de España en Portugal, Juan Fernández Trigo; la consejera de Cultura de la Junta de Extremadura, Victoria Bazaga; el diputado de Cultura de la Diputación de Badajoz, Ricardo Cabezas; y el director gerente del Consorcio Patronato del Festival de Mérida, Pedro Blanco.
Cultura sin fronteras: Lisboa, Mérida y Roma conectadas
Con un discurso centrado en la diplomacia cultural y el poder del teatro como vehículo de unión, Cimarro subrayó que el festival «traza puentes entre lo antiguo y lo contemporáneo, entre ciudades hermanadas por su pasado romano, como Mérida y Lisboa».
Portugal tendrá una participación destacada este año, con las obras Prometeu Agrilhoado de Teatro Livre y Agripinia La Menor de O Nariz Teatro, que se representarán en el Teatro María Luisa de Mérida. Además, la producción extremeña Ifigenia, tras su paso por Mérida, se exhibirá también en Lisboa y en el prestigioso Festival de Ostia Antica (Roma).
Una exposición para dar voz a los olvidados del Imperio
Durante la presentación también se anunció la llegada a Lisboa, en noviembre, de la exposición “Esa minoría inmensa”, que tras pasar por Mérida e Irún pondrá el foco en los invisibles del Imperio romano: campesinos, soldados, artesanos, mujeres, esclavos y libertos.
La muestra invita a mirar Roma desde abajo, desde quienes construyeron su grandeza sin figurar en los mármoles ni en las crónicas imperiales, a través de piezas halladas en Augusta Emerita y otros enclaves arqueológicos.
Diez grandes espectáculos y 150 funciones
La 71ª edición del Festival se celebrará entre el 4 de julio y el 31 de agosto, con una programación que incluye 150 funciones, 10 grandes espectáculos en el Teatro Romano —8 de ellos estrenos absolutos— y una constelación de actividades paralelas: pasacalles, teatro infantil, cursos, conferencias, cuentacuentos y más.
Entre los títulos destacados figuran:
- Numancia, inaugural, producción de Teatros del Canal.
- Alejandro y el eunuco persa, coproducción extremeña.
- Ifigenia, que regresa tras su éxito en 2024.
- Edipo Rey, desde Roma.
- Cleopatra enamorada, musical con Natalia Millán y Álex O’Dogherty.
- Electra, con María León, Elisa Matilla y Patxi Freytez.
- Memorias de Adriano, protagonizada por Lluís Homar.
- Las Troyanas, con Isabel Ordaz y Mina El Hammani.
- Los Hermanos, con Pepón Nieto y Eva Isanta.
- Jasón y las furias, clausura a cargo de Teatro del Noctámbulo.
Extensiones y ecos del Festival más allá de Extremadura
El Festival amplía este año sus extensiones con presencia en Madrid, Medellín, Regina y Lisboa, incorporando por primera vez producciones de República Dominicana y Cuba, además de las ya citadas propuestas portuguesas. El Teatro María Luisa servirá de escenario para siete montajes que reforzarán la pluralidad estética y lingüística de la programación.
La consejera Victoria Bazaga definió el festival como “una propuesta cultural muy bien hecha, generosa, que cruza fronteras y comparte talentos”. Invitó a los lisboetas a “vivir las noches mágicas de Mérida” y destacó la oferta “cultural, gastronómica y paisajística” de Extremadura.
Por su parte, el embajador Juan Fernández Trigo elogió el compromiso del festival con Portugal: “La cultura une, no entiende de fronteras, y este festival es un ejemplo claro de ello”.
Con una programación sólida, diversa y ambiciosa, la 71ª edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida consolida su lugar como referente escénico y diplomático del mundo ibero-romano, reforzando sus vínculos con Portugal, Italia y Latinoamérica. Desde el legado de Roma a los escenarios del presente, Mérida vuelve a abrir el telón al mundo.
