Casi 40 años después de su cierre, la histórica línea férrea de la Ruta de la Plata, que una vez conectó Gijón con Sevilla, sigue siendo objeto de intensas reivindicaciones. La línea, que dejó de funcionar el 1 de enero de 1985, fue un enlace vital entre las capitales de provincia y las importantes poblaciones de Oviedo, León, Astorga, Zamora, Salamanca, Cáceres, Mérida y Zafra.
El gobierno socialista de Felipe González argumentó la “falta de rentabilidad” para justificar el cierre, una decisión que muchos consideraron una estrategia calculada. La consecuencia indiscutible fue que la supresión del tren relegó al oeste peninsular a la incomunicación y al subdesarrollo industrial.
Hoy en día, diversos colectivos de todo el país reivindican la recuperación de la línea, alegando su “valor estratégico”. Al igual que la Transcantábrica, que conecta diferentes comunidades autónomas, la Ruta de la Plata debería incluirse en la Red Básica Europea. Se insta al Gobierno a plantear a la Comisión Europea la inclusión de este corredor ferroviario en la Red Básica Ampliada del Corredor Atlántico de la RTE-T europea.
Pero, ¿es posible recuperar la línea ferroviaria de la Ruta de la Plata? ¿Sería viable económicamente hoy en día? ¿Qué beneficios tendría retomar la conexión por tren entre Gijón y Sevilla? ¿Cuáles son las principales dificultades para hacerlo?
La recuperación de la línea ferroviaria de la Ruta de la Plata podría tener varios beneficios:
- Potenciar el Corredor Atlántico: La línea serviría para potenciar el Corredor Atlántico y abriría una vía para conectar el norte con el sur, evitando Madrid.
- Evitar el paso por Madrid: La ventaja de una línea que evite el paso por Madrid dentro del plan del corredor del Atlántico es una de las necesidades es dejar de tener líneas radiales con Madrid de Alta Velocidad o de tren y tener líneas transversales norte-sur, este-oeste.
- Vertebración de la cornisa Cantábrica: Impulsar y recuperar la línea de la Ruta de la Plata sería muy positivo para el tráfico de viajeros hacia el sur y el oeste del país, porque vertebraría parte de la cornisa Cantábrica: desde Galicia, Asturias y Cantabria, hacia el sur sin tener que pasar por Madrid, y también para el tráfico de mercancías.
- Conexión con Portugal: Francisco Barros, responsable de ferroviarios de UGT en Asturias, destaca que la Ruta de la Plata sería la conexión del Corredor del Atlántico con Portugal, un país de gran importancia para España.
- Trazado norte-sur para las provincias del oeste: Sixto Armán, portavoz de Asturies pol Clima, destaca la importancia de conectar por ferrocarril el norte y el sur del país sin pasar por Madrid, generando una salida para el transporte de mercancías para las provincias del oeste del país.
- Respuesta a la emergencia climática: El ferrocarril tiene que tener un papel clave en el transporte de mercancías y de pasajeros para hacer frente a la emergencia climática, razón por la cual la línea de la Ruta de la Plata debería incluirse en la Red Básica Europea.
- Aumentar el transporte de mercancías por ferrocarril: Luis Blanco, alude a que la recuperación de la línea ferroviaria de la Ruta de la Plata podría contribuir a ganar mercado en el transporte de mercancías ya que señala que por tren sólo se mueven el 4% de las mercancías en España, por lo que nuestro país está a la cola cuando Europa pide que se potencie.
A pesar de los claros beneficios, la reapertura de la Ruta de la Plata enfrenta desafíos significativos:
- Requiere una inversión importantísima: La inversión que requiere es muy importante para adecuar su infraestructura a la realidad y necesidades del siglo XXI.
- Necesidad de un puerto seco en la meseta: Si lo que se quiere potenciar es el transporte de mercancías y, sobre todo, de contenedores, se ve necesario que se haga un puerto seco para optimizar la movilidad, lo que supondría otra inversión más al proyecto.
- Proyecto de viabilidad: La recuperación de la conexión ferroviaria entre Gijón y Sevilla requeriría la elaboración de un proyecto de viabilidad que determinara si realmente compensaría invertir en la línea para un tráfico mixto de viajeros y mercancías teniendo en cuenta que cuando se cerró se hizo por falta de rentabilidad.
En todo caso, la reivindicación que se realiza desde numerosos colectivos a lo largo y ancho de las regiones afectadas ese es una infraestructura que cuanto antes debe propiciar el tránsito ferroviario para que la totalidad de este corredor esté culminado antes del año 2040.