R. DEx, 27 de marzo de 2025.- En una nueva sesión en la Asamblea de Extremadura, María Guardiola, presidenta de la Junta, reafirmó su postura frente a los discursos que, según ella, buscan dividir a la sociedad utilizando a los más vulnerables. «No los compartimos», declaró con firmeza, desmarcándose de la línea adoptada por Vox en su rechazo a la inmigración «ilegal». Este desacuerdo fue, precisamente, el detonante de la ruptura de la coalición entre ambos partidos en el gobierno regional.
Guardiola recordó que las comunidades autónomas no tienen competencias en materia de inmigración, una responsabilidad que recae en el gobierno central. Dirigiéndose al diputado de Vox, Ángel Pelayo Gordillo, señaló: «Todavía no les he visto señalar al responsable, el señor Sánchez». Con estas palabras, la presidenta dejó claro que Extremadura necesita una oposición que priorice los intereses de los extremeños sobre las estrategias electorales dictadas desde Madrid.
El desafío de acoger menores no acompañados
La presidenta también respondió a las críticas de Irene de Miguel, diputada de Unidas por Extremadura, quien reprochó la negativa de la Junta a acoger a 170 menores procedentes de la ruta canaria. Guardiola defendió que Extremadura no tiene problema en recibirlos, siempre y cuando se garantice una atención digna, lo que requiere planificación, financiación y criterios objetivos. «No hay política migratoria ni control de fronteras, y el problema que esto genera en nuestro país lo pretenden resolver repartiendo menores como si fueran mercancía», afirmó, subrayando la necesidad de ser solidarios pero también serios en la gestión.
El «pacto del Ventorro» y los presupuestos
En otro momento de la sesión, Guardiola cerró la puerta a retomar la negociación de los presupuestos de este año, en respuesta al diputado socialista José María Vergeles. Este le recriminó su acercamiento a Vox para aprobar el decreto de medidas fiscales y le preguntó si seguiría el ejemplo del presidente valenciano, Carlos Mazón, quien pactó con Vox los presupuestos de 2025. «No abrace el ‘pacto del Ventorro'», le advirtió Vergeles, haciendo referencia al restaurante donde Mazón comía mientras Valencia enfrentaba una riada.
Guardiola, sin embargo, animó a pensar ya en las enmiendas para los presupuestos de 2026, dejando claro que su prioridad sigue siendo Extremadura y no los vientos políticos que soplan desde Génova.