El Ejecutivo regional aprueba el decreto que pone fin a una década de temporalidad en los bomberos forestales conductores
R. DEx, Mérida, 18 de noviembre de 2025.- La Junta de Extremadura ha dado este martes un paso histórico para el dispositivo de prevención y extinción de incendios en la región. El Consejo de Gobierno ha aprobado la creación de 138 plazas de bomberos forestales conductores del Infoex a jornada completa, lo que supone convertir en empleo estable lo que durante años fue un contrato estrictamente estacional.
La portavoz del Ejecutivo, Elena Manzano, explicó que estos profesionales, que desde 2016 trabajaban únicamente del 1 de junio al 30 de noviembre, pasarán a integrarse en la plantilla los 12 meses del año. “Se trata de pasar de una temporalidad del 50% al 100%”, señaló Manzano, subrayando el papel esencial que desempeñan en la protección del territorio.
Con esta decisión, el Infoex refuerza su estructura y mejora su capacidad operativa:
- La plantilla pasará de 856 a 994 efectivos,
- garantizando así los mismos recursos humanos para extinción que para prevención,
- y permitiendo una planificación más robusta ante un escenario climático cada vez más exigente.
Acceso a las plazas: primero los fijos, luego la bolsa
Sobre el proceso de provisión, Manzano indicó que en primer lugar podrán optar “de forma obvia” quienes ya cuentan con la condición de trabajadores fijos, mediante adscripción provisional.
Una vez se produzca ese movimiento interno, los puestos liberados y el resto de vacantes se completarán con llamamientos en bolsa, con la previsión de que “muy pronto” todas las plazas estén ocupadas y operativas.
La Junta subraya que este paso “refuerza el dispositivo, dignifica las condiciones laborales y mejora la seguridad de los montes extremeños”, en un año marcado por la extensión de las tareas preventivas como uno de los grandes retos frente al fuego.
LUPA DEx
“Los 138 que nunca se fueron: la deuda que Extremadura salda con sus bomberos forestales”
Durante años, los bomberos forestales conductores fueron el músculo invisible de los veranos extremeños. Subían al camión, pisaban las pistas forestales, daban la cara en las llamas y volvían a casa con el cansancio en las manos… para luego pasar medio año en el cajón del olvido administrativo.
Media plantilla en junio. Media plantilla en noviembre. Y nuestros montes ardiendo en marzo o en octubre.
Lo de hoy no es solo una cifra ni un decreto: es el reconocimiento de que la prevención no entiende de calendario,
y de que estos profesionales tampoco deberían entender de temporalidad.
Con esta decisión, Extremadura se acerca —por fin— a un modelo coherente: si el fuego es anual, quien lo combate también debe serlo.
Queda camino por recorrer: mejoras en categorías, EPIs, formación continua y reconocimiento legal estatal.
Pero hoy, al menos hoy, los 138 del Infoex pueden sentir que la región a la que protegen les mira de frente y les dice:
“Era hora”.






